Hoy 
El teatro musical es un género que en los últimos años ha tomado auge en el país. Muchos son los actores que en él han descollado. Antonio Melenciano es uno de ellos.
A Melenciano, a quien hemos visto en las producciones Cats, Peter Pan y Los miserables, se le ocurrió llevar la realidad dominicana a las tablas y lo hace con mucho acierto y jocosidad en el musical I Love RD, mi otra mitad, estrenado en Bellas Artes.
En poco más de dos horas, Melenciano, creador y director del proyecto, pasea a la audiencia por la cultura local con situaciones extraídas del mismo ambiente.
El musical cuenta la historia de Nancy (Rosa Aurora López) una domínico-canadiense que conoce a Papo (Carlos Quezada) a través del Internet y con quien entabla una relación amorosa. Pero el motoconchista Papo -al igual que muchos paisanos- está más interesado en que le haga los papeles y se lo lleven del país, mientras que Nancy desea conocer su entorno y quedarse en la tierra de su madre.
Ya instalada en la pensión de la tía Tania (Amarilis Rodríguez), Nancy conoce la dura realidad de los inquilinos. Allí habitan Belkis (Verónica Rosa), una joven de la vida alegre, amargada por la forma en que perdió a su madre; Mónica (Katyuska Licairac), una rubia atolondrada; el viejo Paco (Jorge Santiago), un anciano que ha sido olvidado por sus hijos, y Danielito (Alek Morillo), un delincuente, entre otros personajes.
A ritmo de merengue, bachata y balada pop, el musical se desarrolla y presenta canciones relacionadas con el país y su gente.
I Love RD, mi otra mitad es una interesante propuesta, con la que Melenciano invita al público a luchar y triunfar en el país a pesar de las adversidades. Como dice el personaje de Papo, aquí quiero vivir, aquí habitan mis sueños.
Zoom
Cositas
Fallas
En la función del sábado, hubo actores que olvidaron algunas líneas del texto de sus personajes. También problemas con las luces, ya que no iluminaban a tiempo a la persona que le correspondía.
Menos localista
Hay ciertas expresiones que para entender su significado necesariamente se tiene que ser dominicano, lo que debe de superarse para que todos lo entiendan.
