“Nada más cobarde que un dólar”

“Nada más cobarde que un dólar”

Escuché la frase del título en boca del profesor Milton Friedman en ocasión de tener la buena fortuna de oír unas clases suyas en Stanford a principios de los años ’80. Poco después, ya de regreso a Santo Domingo, involucrado en la promoción de la inversión extranjera en un proyecto que financiaba la AID, pude constatar que -como todo en la vida- el apotegma citado tiene sus excepciones. A algunos dólares les encanta el riesgo, pues mientras mayor sea éste igualmente enormes son las recompensas en caso de éxito, aunque éste sea menos probable.

La reflexión me vino al escuchar a uno de los principales economistas del PRD despotricar contra el gobierno asegurando mentirosamente que el FMI había decidido interrumpir su acuerdo de apoyo a República Dominicana por alegados incumplimientos.

Este constante cantaleteo ha sido tan ineficaz y sin substancia que los mercados hacen poco caso. Y cuando hacen caso, como ha ocurrido con análisis de los más prestigiosos bancos de Estados Unidos y Europa, es para recordar con aprehensión los efectos sobre la economía dominicana cuando estos desaprensivos economistas perredeístas decidían las políticas públicas.

Precisamente el mismo día de esta semana que los tremebundos economistas partidistas del PRD reciclaban sus viejas historias apocalípticas, la República Dominicana colocó exitosamente una emisión de bonos por US$250 millones, a una tasa de 6.875% (la más baja jamás lograda por el país) con vencimiento en el año 2021, o sea a diez años, para lograr fondos para financiar proyectos de infraestructura o apoyo presupuestal. 

Lo más extraordinario, y el mentís más palmario a los economistas del PRD sobre el estado de las finanzas públicas dominicanas, fue que según la agencia EFE citando al Ministerio de Hacienda, los bonos “fueron lanzados de forma anticipada debido a la elevada demanda que, una hora después superaba los US$2,050 millones, más de ocho veces el monto ofrecido.

Para la colocación se aprovechó una ventana de oportunidad en los mercados internacionales, en un contexto global de alta incertidumbre y volatilidad”. Ciento veinte inversionistas internacionales participaron en la transacción? En julio pasado fueron colocados bonos dominicanos en el exterior por valor de US$500 millones con rendimiento de 6.95%, también con vencimiento en 2021. Y en esa ocasión por igual la demanda fue muchas veces mayor al monto ofrecido.

De tanto gritar “¡lobo!” ya ni Caperucita les cree…

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