“Nueve maestros que trazaron
el camino”, una muestra contundente

“Nueve maestros que trazaron<BR>el camino”, una muestra contundente

El Festival de las Ideas, acontecimiento intelectual en torno a las ciencias sociales y humanas, encabezado por la Dirección de Información y Prensa de la Presidencia y el Archivo General de la Nación, ha incluido las artes visuales.

 Es un testimonio de la necesaria correspondencia entre las disciplinas del saber y de la creación, las cuales a menudo limitan sus actividades al ejercicio profesional y los centros de intereses de su incumbencia. Ojalá este ejemplo se convierta en una norma y que una exposición de arte, más allá de un realce embellecedor, forme parte integral de otros coloquios y festivales.

Con gran acierto, Carlos Santos, coordinador del Festival para el Archivo General de la Nación, sostiene que  “las artes visuales en nuestro país son una expresión en que se manifiesta el universo simbólico y estético dominicano, siendo por tanto una importante esfera para aprehender la realidad,  que reconocemos, a veces captando las influencias de nuestro clima y geografía, otras veces, desde elementos existenciales o de nuestra realidad socio-histórica y cultural.”

La exposición.  Para sustentar este planteamiento esencial, se han reunido, gracias a generosos préstamos institucionales y familiares, las obras de nueve personalidades magistrales del arte dominicano moderno, desde la premodernidad de Abelardo Rodríguez Urdaneta, hasta la postmodernidad, enfocada en el sentido de un arte ya contemporáneo –Paul Giudicelli, Eligio Pichardo, Darío Suro particularmente–. Museografía y montaje de Clara Caminero han dispuesto inteligentemente las obras, guiando naturalmente al espectador desde el Salón de la Cúpula.

A la estudiada selección de cuadros impresionantes de ocho pintores –los cuales a menudo fueron polifacéticos en sus producciones–, se suma un conjunto escultórico, que hoy llamaríamos instalación,  esplendoroso, impactante, incomparable, de Antonio Prats-Ventós, maestro que al desaparecer ha dejado huérfana a la escultura dominicana, un efecto que todavía se siente hasta en la última Bienal de Artes Visuales.

Por cierto, cabe mencionar que tres de los maestros, aquí expuestos: Celeste Woss y Gil, Yoryi Morel y Darío Suro, participaron en la Primera Bienal Dominicana, casi siete décadas atrás. Otros cinco mentores de la plástica dominicana – Jaime Colson, Gilberto Hernández Ortega, Eligio Pichardo, Paul Giudicelli, Antonio Prats-Ventós–  ganaron varias bienales nacionales. forjando un arte identitario, vigoroso, original. Los muros de Bellas Artes, que conservan el recuerdo de sus triunfos, les han acogido “en su casa” el tiempo de una exposición.

El pensamiento visual.  El famoso historiador y crítico de arte Clement Greenberg, emite un juicio respecto a los artistas de mediados del siglo XX que hacemos nuestro respecto a estos maestros del arte dominicano: “Los héroes de la escultura y de la pintura de ese período se autodefinen a sí mismos frente a una verdadera formación de seguidores, ya desde los primeros tiempos, y (…) se mantuvieron, y se mantienen todavía como auténticos héroes”. Así mismo los “heroes” nuestros se autorrealizaron en un arte de liberación, auténtica y perenne: esta muestra lo afirma. 

El denominador común en figuras magistrales tan distintas, es el hecho de que las ideas acompañan la imagen, y la ejecución de la obra traduce una meditación, no solo sobre los fundamentos del arte y sus técnicas, sino también en lo sicológico, lo social, lo vernáculo, según los autores. Siempre con la intención de una comunicación ampliada a una resonancia cultural y a un concepto, la mayor parte de esas obras generan la reflexión. Alternan elementos sociales, ecológicos, mágicos, antropológicos y emocionales en estos discursos estéticos y variaciones de estilos hasta en un mismo artista –siendo Eligio Pichardo y Hernández Ortega  las mayores evidencias de ello–,  y nuestra lectura debe interpretarlos al compás de las búsquedas plásticas. La relación interactiva del espectador ante las obras se intensifica con los troncos-duendes de Prats-Ventós, que se miran y se caminan…

Maestros del pensamiento visual a través de su iconografía, todos fueron al mismo tiempo maestros en la enseñanza, transmitiendo su saber y estimulando a los más jóvenes. Imágenes emblemáticas de ese aporte formativo son los esmerados dibujos a lápiz de los alumnos de la Escuela de Abelardo, muy atinadamente colocados en una sala, cuyo centro ocupa una escultura de Celeste Woss y Gil, ¿la única?

En fin, cada una de las obras maestras dominicanas expuestas aquí suscitaría análisis y comentarios. Concluiremos con una pregunta. ¿Puede pensarse el arte como un objeto, o será lo que nos hace pensar? Estos nueve maestros nos dan la respuesta.

Zoom

Perfil

Los organizadores

El comité directivo está integrado por la Dirección de Información, Prensa y Publicidad de la Presidencia, la Secretaría de Estado de Cultura, el Archivo General de la Nación y la  Galería Nacional de Bellas Artes.

Las colecciones

Banco Central, Cámara de Diputados, Dirección General de Aduanas, Museo de Arte Moderno, Museo Bellapart, Familia Prats-Ventós.

Los artistas

Son los maestros  Abelardo Rodríguez Urdaneta, Jaime Colson,  Eligio Pichardo, Gilberto Hernández Ortega, Celeste Woss y Gil, Yoryi Morel, Paul Giudicelli, Darío Suro, y Antonio Prats-Ventós.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas