Washington.EFE.La jerarquía de la Iglesia Católica amonestó con severidad y los católicos tradicionales reaccionaron ayer escandalizados después que dos obispos excomulgadas ordenaron en Boston a tres mujeres como sacerdotes, desafiando al Vaticano. La ceremonia, realizada el domingo en un templo protestante de la capital de Massachusetts, fue organizada por el grupo Mujeres Sacerdotes Católicas, y la oficiaron Dana Reynolds, de California, e Ida Raming, de Alemania.
Reyndols y Raming son dos de las cuatro mujeres consideradas obispo por esa congregación, y que, según el Vaticano, por sus propias acciones se han excomulgado, es decir, se han excluido de la Iglesia Católica. La Archidiócesis de Boston, en un comunicado, advirtió que la organización que se denomina Mujeres Sacerdotes Católicas no es reconocida como entidad por la Iglesia Católica». Los católicos que pretenden conferir una orden sagrada a una mujer, y las mujeres que intentan recibir una orden sagrada, por sus propias acciones se separan de la Iglesia, añadió la declaración.