La artista Rosario Rivera-Bond inauguró en el sótano del Museo de Arte Moderno la exposición individual Simplemente una ilusión.
En ella, la artista busca, a partir de objetos reciclados de uso femenino como cosméticos, perfumes, joyas, trajes y zapatos combinados con medios mixtos y óleos, emular el consumismo y la acumulación, así como hacer una denuncia y reflexión sobre las situaciones demandantes a que se enfrenta la mujer contemporánea.
Previo a la apertura de la exposición, la artista sugirió a los invitados llevar algún objeto femenino como collares, anillos o maquillaje.
La exhibición, que consta de cuarenta obras de arte, se hizo posible gracias al auspicio del Ministerio de Cultura, el Museo de Arte Moderno, así como la Asociación de Amigos de ese museo.
En cada rincón o espacio había grupos de amigos o familiares de la artista, que asistieron para apreciar lo exhibido allí y dar su opinión al respecto.