Libros, caminos y días dan al hombre sabiduría”; “La lectura es el viaje de los que no pueden tomar el tren” y  “Sin poesía no hay ciudad” son algunas de las frases plasmadas por el grupo de jóvenes Acción Poética  Santo Domingo en murales diversos creados en diferentes puntos de la Capital y algunas provincias  para  a través de la literatura  contribuir a reducir los niveles de violencia que se registran en el país.

La Esquina Joven conversó con directivos de la organización, que destacaron el crecimiento vertiginoso y la acogida que ha tenido el movimiento.

Wilfredo Gutiérrez, Jean Louis Saint, Sarah Miranda, Nicolás Bera, Waldo Oviedo y Nelson Rodríguez se unieron en  esta iniciativa con el firme propósito de generar cambios que permitan a las presentes y futuras generaciones vivir en un clima de menos agresividad e indolencia.      

“La poesía significa expresión y libertad, estar atento y vigilante de nuestra sociedad. Por eso hacemos de ella parte del paisaje dominicano. Arte urbano que hace sentir más que la cantidad de palabras que están pintadas en cada mural”.

La joven Miranda, de 18 años y  estudiante de ingeniería civil,  expresó su experiencia en el movimiento, al tiempo que sus ojos se iluminaban ante la materialización de un proyecto que se inició el 30 de diciembre del  pasado año cuando pintaron su primer mural. A la fecha ya han creado 26 murales.

 “Vivimos en una sociedad donde el amor hacia la literatura es cada día menor, donde la palabra, tal como dijo Benedetti “es el arrabal del odio” y debemos convertirla en correo del amor. Nosotros como jóvenes artistas,  conscientes de lo que nos rodea, pintamos versos de poesía  y llegamos con sutileza a la mente de las personas”, intervino Waldo Oviedo, quien mediante un video conoció del movimiento a nivel internacional y se encargó de gestarlo junto a sus compañeros.

Ellos creen en la magia de la palabra, “que con poco se logra mucho, que dar amor, dar cultura y dar conocimiento, es dar todo lo que tenemos y nos hace felices; para que así lo sean los demás”.

Orígenes. Según explicaron Acción Poética  nace hace más de 16 años en Monterrey, México, de la mano de Armando Alanís Pulido, un poeta y promotor cultural que tras analizar el terror en el que vivía su ciudad, opta por vestir las calles con versos de amor o profundas frases optimistas.

Comenzó a expandirse por toda Latinoamérica con la ayuda de otros artistas;  entre ellos el argentino Fernando Ríos Kissner, que con  Alanís guía todas las demás extensiones.

Es una organización  sin  fines de lucro y no tiene vinculación con ninguna  entidad política, precisó Jean Louis. “Espero que el grupo siga creciendo. Nosotros hemos hecho ya murales en Baní, Santiago, Bonao, La Vega y San Pedro de Macorís”, detalló.

Explicó que la acción no se limita solo a pintar, sino que una vez concluyen esa fase, dedican tiempo a leer. Para Nicolás Bera  es importante que la población se involucre en este tipo de actividades, que generan esperanza y positivismo.

“Buscamos que la gente crezca espiritual e intelectualmente y que fluya el amor que es lo que más nos hace falta en esta sociedad”, comentó. Dice que aunque estudió mercadeo, su gran pasión es la literatura y por eso se involucró en el proyecto.

De su lado, Wilfredo y Nelson entienden que en el país se deben fomentar y apoyar los movimientos culturales.

Hicieron referencia a testimonios de personas que han salido de su lugar de trabajo con alguna preocupación  o irritados, pero  que cuando van transitando por la calle y ven los murales, la actitud les cambia.

Redes. Acción Poética Santo Domingo tiene en su página de Facebook más de 10 mil seguidores y en Twitter supera los 5 mil amigos.