Por ALVIN VALDEZ
MIAMI, Florida. El antesalista dominicano Aramis Ramírez se ha establecido como uno de los mejores jugadores de su posición en las mayores en las últimas temporadas. Sus números ofensivos han sido consistentes con los Cachorros de Chicago.

A Ramírez, sin embargo no le interesa sus logros personales, con nueve años en la liga y con contrato multimillonario solo le interesa ganar y competir. En esto exactamente esta concentrado el pelotero criollo quien logro por quinta vez en su carrera remolcar sobre el centenar de carreras al plato.

“Quiero ganar, en eso estoy concentrado. Trataré de seguir ayudando a Chicago con mi bate y guante. Me siento satisfecho con las remolcadas, creo me he establecido como jugador de grandes ligas. Cuando llegas aquí tu siguiente paso es establecerte, gracias a mi trabajo me ha colocado como un tercera base de calidad”, dijo Ramírez antes del último partido contra los Marlins.

El poderoso bateador derecho ha pegado 26 jonrones, empujado 100 vueltas y batea sobre los .300 en 129 partidos esta temporada. Su defensa ha sido un factor determinante en el éxito de Chicago y los expertos lo mencionan frecuentemente como candidato al guante de oro de la esquina caliente.

Ramírez trabajó en la elasticidad de sus músculos y en la rapidez de sus pies al momento de fildear la pelota durante el tiempo muerto. Esto le ha dado grandes resultados positivos pues solo ha cometido diez errores en este 2007.

Expresa que la madurez también ha influenciado bastante en su mejoría defensiva y que es un halago ser considerado candidato a guante de oro de la Liga Nacional en esta campaña.

“Es un gran halago ser mencionado para guante de oro, motiva a seguir trabajando cuando se reconoce tu trabajo defensivo. Físicamente estoy mucho mas elástico, pero la madurez me ayuda también. No hago tiros innecesarios y ataco mas la bola, esto ha reducido los errores”, explicó.

BEISBOL INVERNAL DOMINICANO

Ramírez pertenece a los Tigres del Licey en el béisbol dominicano de invierno y ante la importancia de la celebración de sus 100 años de existencia manifiesta que desea ser parte de la historia de ese glorioso equipo.

“Conversé con directivos del Licey en los entrenamientos, mi actuación depende de mi salud al finalizar esta temporada. He perdido 30 o 35 juegos este año por lesiones en mi rodilla y muñeca, además podría ser que lleguemos a la serie mundial y esto agotaría más mi cuerpo. Lo que si digo es que si estoy saludable estaré con el Licey en su celebración de 100 años, ese es mi deseo’, concluyó.