Miami, Florida. Antes de cada temporada, los peloteros de Grandes Ligas se trazan metas. Leo Núñez tuvo la suya, y la cumplió.

«Me propuse salvar 30 juegos en el 2011 y ya cumplí», dijo Núñez al conversar para los lectores del Periódico HOY.

Y agregó: «Algunos pensaron que no podía hacerlo, y ese tipo de cosas siempre se constituye en un reto para los atletas».

Al llegar a la jornada del sábado, Núñez tenía 32 juegos salvados, con la salvedad de que ha estado en un equipo que está en un mal año.

Como van las cosas, pasará de los 40, y cuidado.

Pero, ¿cuáles han sido las claves del éxito?

Primero: Estar saludable.

Segundo: Contar con la confianza de sus dirigentes.

Tercero: Aprendió un nuevo pitcheo.

«En el invierno me junté con Joel Peralta y Juan Cruz, y ellos me enseñaron a tirar el slider. Creo que eso ha sido la gran diferencia», expuso Núñez.

Ahora su repertorio cuenta con la recta, el cambio de velocidad y el slider.

Con relación a su futuro, Núñez tiene el cielo abierto.

Este año gana 3.6 millones, pero deberá negociar un nuevo contrato.

«Hasta el día de hoy, ni ellos, ni nosotros hemos hablado sobre ese tema», dijo textualmente el cerrador oficial de los Marlins.

Sin embargo, reveló que existe un clima favorable en las relaciones jugador-equipo, y que eso proyecta cosas positivas.

Es tan fuerte esa tesis, que Núñez se ve con el unifome de los Marlins más allá del 2011.

«Quiero quedarme aquí. Espero que podamos llegar a un acuerdo bueno, porque realmente en esta ciudad mi carrera ha tomado un giro muy positivo», dijo Núñez.

Al hablar sobre los peloteros que le han dado problemas, y los que ha dominado, se ríe.

«Mira, hay dos peloteros que me tienen a jugo, son ellos Shane Victorino y Jimmy Rollins de los Filis», admite. De otro lado, contó que contra Albert Pujols ha tenido un éxito relativo.

«Llevo 3 confrontaciones este año con Pujols. Le di un ponche, una base y un deadball. Bueno, creo que he salido bien frente a ese gran bateador», expuso.