Al momento de consumir alimentos es necesarios que estos estén aptos para el consumo humano y que cuenten con los requisitos necesarios para que no afecten su salud. La modernidad hace que los alimentos tengan aditivos y conservantes que a la larga solo le hacen daño al organismo, provocando así el su deterioro y posibles enfermedades provocadas por los mismos.

Los expertos recomiendan el consumir alimentos 100% naturales y de los cuales usted esté seguro de que provengan de una cosecha en la que no se haya abusado del uso de pesticidas y de abono. Si consume alimentos enlatados procure leer con detenimiento cuáles son sus condimentos y sus calorías antes de usarlos.

Por lo que a continuación le presentamos una lista de 10 consejos para que usted y toda su familia tome en cuenta que además de servirle para llevar una mejor alimentación y les ayudara para prevenir el cáncer y muchas otras enfermedades.

1. Come más frutas y verduras. Al menos, cinco porciones de unas y otras al día; si pueden ser más, mejor.

2. Pásate a cereales, tubérculos y legumbres. En total, se recomienda unas siete raciones diarias o más de estos alimentos ricos en fibras y vitaminas.

3. Modera el alcohol. Lo mejor sería evitarlo, pero si, por ejemplo, tomas vino tinto por sus otros beneficios como los cardiosaludables-, no te bebas más de dos copas diarias si eres hombre y una si eres mujer.

4. Limita la carne roja. Algunos expertos dicen que no más de una vez por semana; en cualquier caso, nunca tomes más de 80 g. diarios.

5. Controla las grasas. Elimina totalmente las saturadas, de origen animal; de las otras monoinsaturadas y polisaturadas-, no abuses tampoco.

6. ¡Ojo con la sal! Reduce su consumo todo lo que puedas; es recomendable no superar los 6 g diarios. Cambia la sal de mesa por especias y condimentos: perejil, ajo, limón

7. Almacena bien los alimentos. No consumas aquellos que por estar expuestos durante largo tiempo a temperatura ambiente puedan desarrollar sustancias contaminantes como micotoxinas.

8. Refrigera y congela. La comida perecedera debe guardarse siempre en el frigorífico o congelarse hasta que vayas a consumirla.

9. No abuses de aditivos. Tampoco de colorantes ni otros residuos; aunque su uso debe estar regulado, no siempre son fáciles de controlar si recurres mucho a alimentos precocinados, enlatados, etc.

10. Cuidado con las altas temperaturas. Conviene evitar el braseado y, en general, los alimentos directamente cocinados al fuego. Además, se recomienda limitar el consumo de curados y ahumados.