El Popular

El Banco Popular Dominicano, una de las grandes marcas que sustentan el portafolio del Grupo Popular, es un referente positivo de cómo se deben gestionar estratégicamente los activos intangibles de una empresa. Cuando los activos intangibles son percibidos de manera positiva, éstos permiten que las empresas que los poseen puedan establecer más y mejores vínculos con sus grupos de interés. El liderazgo, el reconocimiento público y el prestigio que siempre han acompañado al Popular, son indicadores que evidencian la forma correcta en que son gestionados sus activos intangibles.

En esta época, en la que las percepciones, actitudes y opiniones de los ciudadanos inciden en el posicionamiento de las organizaciones, la identidad, la reputación, la confianza, la credibilidad y la imagen pública, se han convertido en activos intangibles, los que en algunas ocasiones y circunstancias valen más o igual que los tangibles. En el entorno competitivo actual no es posible mantener buen posicionamiento y una notoriedad pública positiva, solo mejorando los activos intangibles.

Por lo general, en las empresas guiadas por un régimen de gobierno corporativo sustentado en valores y principios, como en el Banco Popular, la gestión de la reputación, la confianza, la credibilidad y la imagen pública, es una de las tareas estratégicas que se le asigna al talento humano responsable de planificar, ejecutar y controlar las estrategias y acciones de comunicación y relaciones públicas. Las más prestigiosas publicaciones confirman año tras año el liderazgo del Popular en el mercado financiero nacional y regional, lo cual habla muy bien de su identidad, reputación, credibilidad e imagen pública. La coherencia y consistencia entre el pensar, el decir y el hacer son las piezas claves para lograr que la reputación, la confianza, la credibilidad, el carácter y la imagen pública de una empresa sean en activos de alto valor.