La jueza del Cuarto Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, Pilar Rufino, justificó la decisión de imponer arresto domiciliario a Pascual Cordero Martínez (El Chino), acusado de narcotráfico.

Dice que se ha querido hacer ver que El Chino estaba en prisión y que ella lo liberó y que la realidad es, que cuando el caso que tiene llegó a ese tribunal ya estaba en libertad, y que lo que hizo ahora fue agravarle la medida.

“El tiene una prisión por otro caso y por el caso de aquí, siempre ha estado en libertad”, dijo Rufino y explicó que él llegó con el cese de una prisión desde el Cuarto Juzgado de Instrucción, quien lo envía a juicio de fondo por narcotráfico y lavado de activos.

Admite que el imputado no presentó examen médico al momento de pedir que le otorgaran prisión domiciliaria, sin embargo éste mostró en el tribunal dos operaciones, en espalda y vientre, por lo que consideró que necesitaría de atenciones médicas.

Dijo que visualmente se podía percibir que el prevenido no estaba bien, y que además valoró que ya tenía otra prisión preventiva.

La fiscalía dijo que apelará el fallo. Había pedido que al imputado se le impusiera prisión preventiva, pues fue declarado en rebeldía en septiembre 2015.
El Chino seguirá en prisión por la coerción que se le impuso en un tribunal de Higüey, en diciembre 2015, por acusaciones de asesinato y lavado de activos. El miércoles 17 tiene juicio de fondo en la capital.