La Policía Nacional reportó hoy las muertes de tres personas por ahogamiento en el río Ozama, Distrito Nacional; un menor en el municipio de Nagua, provincia Martía Trinidad Sánchez, así como un estadounidense en Puerto Plata.

La institución explicó en una nota de prensa que en el sector La Ciénega del Distrito Nacional, agentes policiales junto a miembros de la Unidad de Bomberos de la zona, sacaron de las aguas del río mencionado el cadáver de un hombre, hasta el momento no identificado, quien aparenta una edad aproximada de 30 a 35 años, y vestía un T-shit de color, azul, un pantalón negro y unos tenis rojos.

El vocero de la uniformada, Máximo Báez Aybar, dijo que el informe preliminar del caso refiere que el cuerpo estaba flotando en las aguas de río, cuando moradores del citado sector lo vieron y dieron parte a las autoridades. El médico legista actuante diagnosticó preliminarmente muerte por ahogamiento.

Báez Aybar dijo que luego de ser sacado de las aguas, las autoridades policiales trasladaron el cadáver al Instituto Nacional de Patología Forense, para los fines de necropsia.

Asimismo, que en Nagua, provincia María Trinidad Sánchez, se ahogó el menor identificado como Julio César Fernández López, de 16 años, quien se encontraba bañándose en la playa El Gringo, de esa localidad, según reveló una menor de edad, que según versiones era su novia.

El informe preliminar indica que el joven andaba en una gira procedente desde Cotuí, en compañía de su novia y otros adultos, todos residentes en el referido municipio.

Según el diagnóstico del médico legista actuante, el occiso falleció de asfixia por inmersión. La uniformada comunicó que el cadáver del menor fue trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), en San Francisco de Macorís.

En tanto que en Cabarete, Puerto Plata, las autoridades reportaron el fallecimiento del estadounidense Joel Alan Russel, de 63 años, quien murió mientras recibía atenciones médicas.

El informe preliminar hace referencia que el turista se encontraba bañándose en las aguas de una playa ubicada frente al condominio donde se hospedaba, en la referida cuidad, de donde fue sacado y trasladado al centro de salud donde murió mientras recibía atenciones médicas, diagnosticando el médico legista actuante asfixia por inmersión.

El cadáver del extranjero fue llevado al INACIF de Santiago, para los fines de necropsia mandatorios.