Cuatro muertos y un herido en incidentes centros electorales

Cuatro muertos y un herido en incidentes centros electorales

Tres personas perdieron la vida en un incidente en la comunidad de Reparadero, Los Botados, Yamasá y otra murió en Monción, Santiago Rodríguez. Además hay un herido que está grave.

Una de las víctimas de Yamasá fue identificada como Júnior Moreno Martínez, de 34 años, quien deja tres hijos en la orfandad. La de Monción fue identificada como Simón Rodríguez.

El incidente de Yamasá ocurrió pasadas las 6:00 de la tarde cuando un hombre en un vehículo pasó por el colegio electoral y disparó contra las personas que estaban al frente, según las versiones. Los cuerpos fueron llevados a la morgue del hospital local.
La muerte de Rodríguez, quien recibió un tiro en la cabeza de manos de Pepe Torres Salado, fue producto de una riña en el exterior de un colegio electoral de Monción. El supuesto matador fue herido por los compañeros de Rodríguez y llevado a un centro médico local.

Los comunitarios dijeron que discutían por las candidaturas de los senadores del Partido de la Liberación Dominicana y Revolucionario Moderno y que en un momento el matador sacó una pistola y le disparó.

Al observar esta acción, dijeron, los compañeros de Rodríguez sacaron armas y dispararon contra Torres Salado.

En Dajabón. Un enfrentamiento a balazos entre seguidores de la senadora oficialista y candidata, Sonia Mateo, del dirigente peledeísta Olgo Fernández y del aspirante a senador por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), Mario Torres, paralizó ayer por unas horas las votaciones en los colegios del ayuntamiento.

El tiroteo, que no dejó heridos, provocó que el general de brigada Carlos Aguirre Reyes, quien comanda la Policía Militar Electoral, redoblara la vigilancia.
Según testigos, el incidente ocurrió cuando seguidores del director del Instituto de

Recursos Hidráulicos, Olgo Fernández, colaboraban con el PRM, lo que molestó al grupo de Mateo y se inició una discusión que terminó a balazos. En el sector La Fe, donde se registraron incidentes menores, más de 450 policías y militares fueron asignados para mantener la seguridad en el proceso.

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