El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) dispuso hoy el alerta roja para las provincias Puerto Plata y María Trinidad Sánchez, debido a la saturación del suelo producto de las lluvias registradas en el país, que en el caso de la Novia del Atlántico ha provocado desbordamientos de ríos, inundaciones en zonas rurales y urbanas, así como unas 400 viviendas afectadas, según el levantamiento que realiza en estos momentos la Defensa Civil.
El organismo de socorro colocó además en alerta amarilla a Espaillat, La Altagracia, Montecristi y Dajabón, en tanto que en verde se encuentran Sánchez Ramírez, San Pedro de Marcorís, Duarte, Monseñor Nouel, San Cristóbal, Monte Plata, El Gran Santo Domingo, Pedernales, El Seibo, Hato Mayor Santiago, Independencia y La Romana.
En total, las provincias en alerta suman 20, destacándose Puerto Plata cuya alerta roja prevé un impacto de fenómeno en la zona, presentando daños a los bienes, personas, infraestructuras y medio ambiente, como en el día de hoy se ha registrado en numerosas comunidades de esa provincia.
El COE explicó que la medida dispuesta responden a lo establecido en el boletín de esta tarde emitido por la Oficina Nacional de Meteorología, el cual establece que el sistema frontal casi estacionario continúa sobre la costa norte del país el cual, unido al alto contenido de humedad que permanece en la masa de aire, producirá aguaceros ocasionalmente fuertes.
Rafael de Luna Pichirilo, director de la Defensa Civil, explicó en un programa radial que aun no se tienen los datos concluyentes del levantamiento que realizan en Puerto Plata, sin embargo las informaciones que maneja hasta el momento dan cuenta de unas 400 viviendas afectadas.
Sostuvo que estos fenómenos tienden a causar daños sobre todo a las personas que habitan en zonas vulnerables, pero que los trabajos de coordinación con las redes comunitarias y juntas de vecinas han contribuido a prevenir las novedades en cuanto a mortalidad se refiere, ante la presencia de las inundaciones.
«Las inundaciones urbanas, después de los terremotos, es la segunda amenaza que afecta más a la población dominicana», expresó De Luna Pichirilo, quien abogó por impulsar la iniciativa para continuar la movilización de personas residentes en lugares vulnerables a zonas más seguras.