Exdiplomáticos sugieren a Trump invalide medidas de apertura hacia Cuba

Exdiplomáticos sugieren a Trump invalide medidas de apertura hacia Cuba

Miami (EE.UU.).- Cinco exdiplomáticos estadounidenses con experiencia en América Latina han aconsejado al presidente electo, Donald Trump, que en sus primeros 100 días de mandato o “lo antes que pueda” rescinda las órdenes ejecutivas de Barack Obama relativas a Cuba por “ilegales y mal concebidas».

“La política estadounidense hacia Cuba y hacia cualquier otro lugar debe ser consecuente con la ley de Estados Unidos”, dicen Elliott Abrams, Otto J. Reich, José S. Sorzano, Everett E. Briggs y James C. Casson en una carta dirigida a Trump y publicada por el Centro para una Cuba Libre, con sede en Washington.

Los dos primeros fueron secretarios de Estado adjuntos para América Latina, el tercero, exembajador ante Naciones Unidas, el cuarto, exembajador en Honduras y Panamá, y el quinto, exembajador en Paraguay y exencargado de la misión estadounidense en La Habana.

Los firmantes de la misiva cuestionan por completo la nueva política bilateral anunciada por Obama y el presidente cubano, Raúl Castro, a fines de 2014. Según dicen, la carta tiene como finalidad aportar a Trump, que asumirá la Presidencia el 20 de enero, “sugerencias” para poner en práctica su promesa de cambiar el curso de la política hacia la isla.

Una de esas “sugerencias” es retirar al embajador designado por la Administración Obama y enviar a La Habana a un diplomático más acorde con la visión de la política exterior de Trump. Aunque la tarea que debe encararse “lo antes posible”, según dicen, es acabar con la orden que ordena a la inteligencia estadounidense que coopere con la seguridad del Estado de Cuba.

También es necesario “prohibir” el “turismo, las compras de bienes cubanos y ser socios de entidades del gobierno” de la isla, es decir volver a la fase anterior al “deshielo». A juicio de los exdiplomáticos, los “gestos amistosos” de Obama hacia el Gobierno de Castro y sus afirmaciones de que “Estados Unidos no busca cambiar el régimen”, “que el cambio puede llevar años” y que los cubanos deben ser “pacientes” han dado como resultado un “aumento importante” de los que huyen de la isla con vistas a llegar a EE.UU.

“Reconocer legitimidad (al régimen castrista) y reabrir nuestra embajada en La Habana fueron decisiones que se tomaron sin resolver uno solo de los temas pendientes de una larga lista”, agregan.

Entre ellos mencionan “la restitución de miles de millones de dólares de propiedades privadas robadas por el régimen”, los delincuentes reclamados por EE.UU. que están asilados en Cuba, los los lazos militares “ilícitos” de Cuba con Corea del Norte y su acercamiento a Irán, y el apoyo cubano a gobiernos latinoamericanos anti-estadounidenses.

Respecto a las ordenes ejecutivas que levantan restricciones y permiten hacer negocios con Cuba señalan que, en lugar de ser un alivio para el pueblo cubano, lo que han hecho es dar un respiro económico al régimen, que le ha servido para “reducir, que no expandir, la actividad económica privada y aumentar la represión contra el movimiento disidente».

Abrams, Reich, Sorzano, Briggs y Casson critican medidas como la retirada de Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo y “el cese de todos los contactos con la oposición” al Gobierno cubano, así como la abstención estadounidense en una votación en la ONU contra una ley de EE.UU. sobre la Libertad en Cuba y la Solidaridad Democrática. “Todo eso debe ser revertido, empezando por instruir a los representantes de EE.UU. en organismos internacionales a que defiendan la ley de EE.UU., como han jurado hacer”, dicen los firmantes de la carta.