La tarde del jueves 27 de noviembre del 2014 cambió la vida del comunicador Rafael Padilla, su salud emocional le falló: sufrió un ataque de depresión y salió corriendo desnudo en una plaza comercial de Santo Domingo; allí fue grabado y colgado a las redes sociales. Lo que provocó que se volviera blanco de burlas de mucha gente en Internet.
“Tras la muerte de mi tía predilecta en el año 2011, quien me comprendía y apoyaba, más el sentimiento de rechazo que sufría por mi orientación sexual, empecé a sentir tristeza y angustia, por lo que me diagnosticaron trastorno de depresión”, cuenta.
Admite que la crisis fue producto de su decisión de dejar de tomar su tratamiento, pensando que ya había superado este mal.
Padilla cuenta que peor que el sentimiento de culpa y tristeza por ese incidente, fue tener que enfrentarse al feroz cyberbullying.
“Puedo decir que ha sido el momento más doloroso de mi vida; muchas personas se burlan de mi en las redes, perdí mi trabajo, que me encantaba; mucha gente me dio la espalda, y lo que es peor, donde quiera que pasaba me preguntaban: “¿tú fuiste el que se desnudó en la plaza?”, recuerda aún compungido.
Aquella tarde cuando sus emociones lo traicionaron quedaron truncos sus sueños de convertirse en un gran cronista de espectáculos. Sin embargo, varias luces se encendieron en el túnel donde estaba atrapado y lo ayudaron a encontrar la salida.
“Se necesita de mucha fuerza de voluntad y el apoyo de la familia y los amigos para salir adelante y sobrellevar esta enfermedad”, dice el joven de 33 años.
El psiquiatra Secundino Palacios, las comunicadoras Judith Leclerc, Arisleyda Villalona, el pastor Marcos Yaroide, su familia y muchos de sus amigos fueron determinantes para que Rafael superara ese episodio.
“No puedo borrar ese mal momento de mi biografía de vida, pero tampoco me voy a dejar destruir por eso; gracias a la ayuda médica que he recibido y al apoyo incondicional de mucha gente, logré estabilizar mi salud y he podido retomar mi carrera”, afirma.
El valor de regresar. Meses después de haber retomado su tratamiento, en el año 2015 le ofrecen un segmento en una revista de la emisora digital Unikradio.net, “y luego de tener un tiempo ahí el propietario y director de esa emisora digital, José Alberto Selmo, me ofreció un espacio independiente e idearon el programa “Luces y espectáculo”.
Se abre paso en la TV. Inquieto por demostrar su talento, en el 2017 decide participar en el reality “Reportan2”, del programa dominical “Aquí se habla español”, que produce y conduce el comunicador venezolano Daniel Sarcos.
Durante la competencia, Padilla tuvo que enfrentar varios retos que le asignaban dentro del concurso para mostrar su talento como reportero. Y aunque su mayor experiencia era en la radio, vio la gran oportunidad para volver a hacer lo que más le gusta.
“El concurso comenzó con 24 jóvenes, entre dominicanos y venezolanos, donde cada semana los miembros del jurado eliminaban uno, hasta que el grupo se redujo a seis finalistas”, explica.
Al final Rafael terminó llevándose el primer lugar, recibiendo una placa, un premio metálico de RD$50,000 y la oportunidad de trabajar tres meses como reportero del programa “Aquí se habla español”, que se transmite de 12:00 a 4:00 de la tarde, todos los domingos, por el canal de televisión Antena 7.
Esta etapa, que concluye mañana domingo 25 de marzo, es vista por este joven como una experiencia para demostrar que se puede salir adelante y que un mal momento no determina toda la vida.
“Yo quiero que todos aquellos jóvenes que están pensando que su mundo se está derrumbando, tomen el control de sus vidas y decidan salir a luchar por sus sueños”.
Experiencia. Padilla es estudiante de término de Comunicación Social de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), locutor profesional y coreógrafo. Inició en la radio en el 2011 en el programa de Z arte, de la emisora Z101 junto a la periodista Casiana del Rosario, y posteriormente pasó a la “Casiarte”, de la radiodifusora Supra 101.7.
En el 2012 entró a formar parte de “Happy Hour”, de la emisora Fidelity 94.1 FM con la sección “Dando candela”, donde estuvo laborando hasta el 2014. Fue despedido, pocos días después de la crisis nerviosa.
En televisión hizo algunas colaboraciones para el programa “Lo Que Se Dice y Lo Que Se Calla”, de Jary Ramírez, así como para Formal mente informal, de Arisleyda Villalona, La Condesa.