El Sexto Juzgado de la Instrucción de la provincia Santo Domingo aplazó para el 13 de junio la audiencia preliminar contra el mayor retirado de la Policía Nacional, Rafael Isidro Perozo Torres, acusado de la muerte de los jóvenes Ángel Luis Castillo Sánchez y Francisco Javier Martínez Fermín, para dar oportunidad a que la defensa del acusado tome conocimiento de la acusación.
Ayer, la familia de ambas víctimas exigieron que en el caso se haga justicia y que el acusado sea llevado a una cárcel ordinaria, donde este no pueda disfrutar de los privilegios de la cárcel de Operaciones Especiales, donde se encuentra.
El hecho ocurrió en agosto del 2017 en Buenos Aires, de Herrera, supuestamente por un episodio de celos del policía retirado, luego que los jóvenes estuvieran compartiendo con su novia, la joven Lizbeth Guzmán.
Según declaró Suleika Margarita Reynoso, testigo en el caso, las víctimas se encontraban en su casa, mientras ella tejía el cabello de Castillo Sánchez.
El policía habría intentado agredir a la novia, cuando los jóvenes, en su defensa, fueron muertos a tiros por este.
Castillo Sánchez trabajaba para este diario en el área de distribución.
“Yo lo que pido es justicia por el daño que le hicieron a mi hijo”, pidió Ramón Castillo, padre de la víctima.