El Día Mundial de la Escucha se celebra cada 18 de julio con la meta de generar conciencia sobre cómo prevenir la sordera y la pérdida auditiva. Esto incluye promover el cuidado del oído a nivel mundial.

La fecha fue establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el marco de la primera Conferencia Internacional en Prevención y Rehabilitación del Déficit Auditivo, celebrada en Beijing (China) en 2007, y su elección tiene que ver con que el día y el mes (ambos 3), que emulan la forma de dos orejas enfrentadas.

¿Por qué es importante para el mundo esta fecha?

Los mensajes que se transmitirán son:

– La atención otológica y audiológica permite conservar una buena audición durante toda la vida.

– Muchas causas habituales de pérdida de audición son prevenibles, entre ellas la exposición a sonidos fuertes.

– La «escucha segura» puede reducir el riesgo de pérdida de audición asociado a la exposición a sonidos en actividades recreativas.

Por otro lado, la OMS asegura que el jueves 3 de marzo se darán los siguientes lanzamientos: Una norma mundial sobre recintos de entretenimiento con seguridad auditiva, el manual mSafeListening, y un conjunto de herramientas para periodistas sobre medios de comunicación.

Lee más: Identificada primera cirugía de oído con éxito hace más de 3.000 años

Combatir la sordera

Es importante en el sentido de incentivar que se detecte de forma temprana la sordera. Es fundamental que se evalúe a todos los recién nacidos a nivel auditivo.

En ese sentido, con un diagnóstico precoz, esos niños podrán ser equipados de modo de no ver afectado su desarrollo, crecerán y se relacionarán como normo oyentes.

Por ello, la llegada de un bebé al mundo llena de alegría a toda la familia. Que tenga buen peso al nacer y que se lo vea “sanito”.

Sin embargo, no siempre estos parámetros serán el reflejo de que todo esté absolutamente bien. Existen diferentes dolencias que no se notan a simple vista pero que es fundamental detectar lo antes posible. La sordera profunda es una de ellas.

“El poder actuar frente a una hipoacusia detectada en forma temprana, es decir, en los primeros meses de vida, significa tener la posibilidad de lograr que niños hipoacúsicos desarrollen habilidades auditivas y lingüísticas comparadas con las de niños con audición normal”, explicó Eduardo Hocsman, jefe de otología del Hospital de Clínicas en una conversación con Infobae.

El modo correcto de cuidar el oído

– Realizar control auditivo a los bebés recién nacidos (otoemisiones acústicas).

– Realizar audiometría de control al ingreso escolar primario.

– Evitar la exposición a ruidos de elevada intensidad. Usar protección auditiva si se trabaja en ambientes ruidosos.

– No exponerse a música de altas intensidades, principalmente cuidar a los bebés en las fiestas (alejarlos de los parlantes y proteger los oídos).

– Usar con moderación y a baja intensidad los reproductores de música.