CONSULTORIO DE NUTRICIÓN

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P: ¿Es seguro consumir café durante el embarazo y la lactancia?

R: El consumo mundial de café alcanza los 19 billones de libras al año.
El café contiene 200 mg de cafeína/taza, el café filtrado 140 mg/taza, el descafeinado 2-4 mg/taza, las bebidas de cola 60 mg/lata y las bebidas energizantes 160 mg/8 onzas.
Otras fuentes de cafeína son: té negro, chocolate, malteadas, etc. Según un estudio noruego los niños de madres que toman 2 tazas de café al día durante el embarazo tienen una probabilidad 30% mayor de tener sobrepeso; y si consumen más de 3 tazas diarias el riesgo aumenta un 66% (E. Papadopoulou y col BMJ Open2018).
En el embarazo, el Servicio Nacional de Salud de Inglaterra recomienda consumir hasta 2 tazas de café al día; pero Papadopoulou del Instituto Noruego de Salud Pública en Oslo sugiere evitar su consumo por completo, ya que la cafeína puede afectar el crecimiento del niño, aumentando el riesgo de obesidad.

El exceso de cafeína durante el embarazo puede causar abortos espontáneos y bajo peso al nacer, pues la cafeína atraviesa libremente la placenta, afectando al cerebro del bebé.
El consumo diario de cafeína durante el embarazo no debe exceder los 200 miligramos. Sin embargo, cualquier exposición a la cafeína durante el embarazo aumenta el riesgo de sobrepeso infantil a la edad de 3-5 años; y si el consumo es mayor de 3 tazas de café al día el riesgo de obesidad infantil se extiende hasta los 8 años.
Aproximadamente 1% del total de cafeína consumida por la madre lactante pasa a la leche materna. En un adulto sano la cafeína permanece en el cuerpo por 3-7 horas; pero en los niños lactantes puede durar unas 65-130 horas, porque su hígado y sus riñones no están completamente desarrollados (Temple J y col, Front. Psychiatry 2017).
El consumo de 300 mg de cafeína (2-3 tazas de café/día) es seguro para la madre como para el niño alimentado al seno materno; pero un consumo mayor causa en los lactantes: trastorno del sueño, irritabilidad, agitación y cólicos; y en las madres: nerviosismo, irritabilidad, ansiedad, taquicardia, insomnio y menor producción de leche (Wikoff D y col Food Chem Toxicol. 2017).

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