Difícil es que alguien se resista a unos ricos tacos, algunos los prefieren de masa dura, mientras que otros optan por los de masa blanda, pero, en cualquiera de sus versiones, son populares y deliciosos.
Ahora bien, aunque la tortilla de los tacos juega un papel preponderante, el relleno es igual en importancia y es ahí donde está marcada la diferencia entre un taco y otro.
Los tacos constituyen un sello en la gastronomía mexicana, y aunque esta comida se pasea prácticamente por todo el mundo -de hecho, Estados Unidos celebra el 4 de octubre el Día del Taco- es México el país de donde procede y el lugar donde tiene mayor arraigo. Es ese país celebran el Día del Taco cada 31 de marzo.
Entre los tacos más tradicionales, o emblemáticos de esta nación, se destacan los tacos de canasta. Los más comunes de esta variedad son los de papa, chicharrón y frijol, aunque sus ingredientes podrían ser diferentes.
Están también los denominados “acorazados”, procedentes de la comunidad de Cuautla, Morelos. Se dice que estos son ideales para personas de buen comer. Sus ingredientes son diversos guisos, no obstante siempre llevan una base de arroz.
Asimismo están entre los tacos típicos de México, los “dorados”, que tienen como ingredientes crema de queso y salsa, y su relleno puede de pollo, papa, carne, e incluso de asados.
Un taco muy tradicional mexicano es el “gobernador”, una variedad procedente de Sinaloa cuyos ingredientes principales son mucho queso y camarones.
El taco “al pastor”, oriundo de Chilanga, es otra delicia mexicana, donde se cuenta que surgió en la década de los 60.
Igualmente están “los mineros”, cuya preparación consiste en una mezcla de carne de cerdo, frijoles, papas y tocino. Hay quien le añaden también chorizos.
Otra preparación emblemática de tacos mexicanos son los “placeros”, nombre que surge porque son preparados en plazas, mercados… generalmente tienen como ingredientes chicharrón crocante, nopales, aguacate y queso blanco.
¿“Se le hizo la boca agua? ¡Prepárelos!
Las recetas
Tacos dorados
1 pechuga de pollo cocida
20 tortillas de maíz calientes
Aceite vegetal
200 gramos de queso rallado
1/2 lechuga picada
Crema
1 jitomate en rodajas
1 aguacate en rebanadas
Preparación. Desmenuzar la pechuga. Colocar un poco de la pechuga en el centro de una tortilla y enrollar. Asegurar la tortilla con un palillo de madera. Agregar suficiente aceite en una sartén y añadir los tacos previamente hechos. Cuando tengan un color marrón claro, retirar de la sartén. Para el montaje; servir los tacos sobre un platón y añadir la lechuga, la crema, el queso y algunas rebanadas de jitomate y aguacate, y listo.
Taco al pastor
1 kilo de lomo de cerdo, cortado en filetes delgados
3 chiles guajillo, sin las semillas
2 chiles anchos sin semillas
2 chiles chipotle en adobo
2 dientes de ajo machacados
1 cebolla en trozos
1/4 de taza de vinagre
1/2 taza de jugo de naranja
1 taza de piña picada
3 clavos de olor
1 cucharadita de comino
1 cucharadita de orégano
1 jitomate asado, pelado y sin semillas
1 cucharada de sal
Preparación. Tortillas de maíz preferiblemente hechas a mano
4 rebanadas de piña
1/2 taza de cilantro limpio y picado
1/2 taza de cebolla picada
Salsa taquera de tomate (tomatillo) Rebanadas de limón
Preparación. Asar el jitomate en un sartén a fuego medio-alto, volteándolos constantemente, hasta que su piel se haya quemado y empiece a desprenderse, aproximadamente 10 minutos. Pelar y cortar por la mitad y desechar las semillas. Mientras, hervir suficiente agua en una olla mediana y agregar los chiles guajillo y ancho. Dejar que hiervan hasta que se hayan suavizado, aproximadamente 5 minutos. Colocar los chiles hervidos en el vaso de la licuadora. Agregar los chiles chipotle, ajo, cebolla, vinagre, jugo de naranja, piña picada, clavos de olor, comino, orégano y jitomate asado. Licuar hasta tener una salsa homogénea. Colocar la carne en un tazón de vidrio o bolsa con cierre y agregar la salsa asegurándose que cubra toda la carne. Marinar dentro del refrigerador durante unas 4 horas o durante toda la noche. Precalentar una sartén a fuego medio-alto. Asar los filetes marinados previamente, voltearlo una vez, hasta que se hayan cocido completamente, por aproximadamente 2 minutos por cada lado. Mientras, asar las rebanadas de piña hasta que estén dorados ligeramente, por unos 5 minutos por cada lado. Si se prefiere se pueden barnizar con la salsa de la carne mientras se asan. Picar la carne y la piña. Servir la carne sobre tortillas calientes, agregar piña asada. Añadir cilantro y cebolla picada, salsa de tomate y unas gotas de jugo de limón.