El histórico “Día D” nos recuerda el desembarco de las fuerzas aliadas en las playas de Normandía, aquel 6 de junio del año 1944, con el cual se pretendía liberar la Europa occidental dominada entonces por el nazismo alemán y así poner fin a la II Guerra Mundial.

Al igual que entonces, los dominicanos tenemos una cita este 20 de mayo con nuestro propio “Día D”, con el “Día de Danilo”.

Un encuentro patriótico que nos permitirá impedir que las fuerzas del “Eje”, representantes el retroceso y la anarquía, nuevamente implanten el terror ocupando espacios de poder que luego no sabrán cómo administrarlos.

El desembarco masivo de votos en las playas de las urnas electorales a favor de la candidatura del PLD y los “Aliados”, hará de esta fecha un recuerdo inolvidable de la victoria de la razón, la cordura y la capacidad, sobre la incoherencia, el desenfreno y la incapacidad.

Este “Día D” marcará el inicio de una temporada de profundas transformaciones políticas, sociales y económicas, superiores a las que a través del Plan Marshall se llevaron a cabo en Europa después de la II Guerra Mundial, pues distinto a éste, los planes de Danilo serán aplicados sobre una economía estable, con un PIB creciente, una tasa de desempleo descendiendo notablemente, en un clima de inversión atractivo para los capitales foráneos, por lo que debemos admitir que son muchas las cosas de la actual gestión gubernamental, que por estar bien se deben continuar.

Por otro lado, está el compromiso de corregir lo que está mal, sí, como dijo Salomón: “las moscas muertas hacen heder el perfume del perfumista”.

 A esas, luego hay que sacarlas y coronar la gestión haciendo lo que nunca se hizo.