El presidente Hipólito Mejía está seguro de que en caso de ser favorecido con la reelección el año 2005 sería el de la recuperación.

La panacea de los problemas del país, indicó, serán el aumento de 30% de los salarios públicos, la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) y el seguimiento de los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

En estos términos habló el mandatario y candidato por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en la segunda ronda de La propuesta de los candidatos, un programa de televisión que se transmite desde ayer de siete a nueve de la mañana a través de Telesistema, Teleantillas, Coral 39, La Nota Diferente (95.7) y HIJB (8.30).

«He calificado al año 2003 como al año de la crisis, al año 2004 como el año del ajuste y el 2005 como el de la recuperación, recuperación económica, recuperación psicológica o como tú la quieras poner», dijo el mandatario al ser cuestionado sobre los tiempos buenos que promete en su campaña publicitaria de su candidatura.

En esos tiempos daría prioridad a dos áreas: la salud y la educación. También pretende producir 200,000 soluciones habitacionales con los que beneficiará a los sectores más pobres del país.

[b]PODER ADQUISITIVO[/b]

El presidente Mejía no tiene ninguna duda de que la sociedad necesita un reajuste salarial. Por ello, no dudó en comprometerse a hacer dos aumentos salariales en un período de dos años.

«He estado consciente de la realidad del país. No soy ciego ni mudo ni… no, no, esos números se han analizado. Sabemos que debemos devolverle el poder adquisitivo a la población y está un reajuste, dije yo de 30%, y a los seis meses otro reajuste».

Los médicos, manifestó, deben esperar a ese reajuste en lugar de estar haciendo huelgas con lo que entiende quieren chantajearlo. Por eso, subrayó, no promulgará el aumento de ese sector en caso de que sea probado por el Congreso.

[b]REFORMA FISCAL[/b]

Respecto a sus planes en un nuevo gobierno, Mejía sostuvo que ya tiene su política macroeconómica definida. «La Superintendencia juega su rol, los sectores saben que esas son las reglas del juego, nosotros hemos pedido su entendimiento,» dijo.

Como parte de esa política, se incluirá una reforma fiscal y arancelaria. «Ahora llega, y debe ser, la reforma que todos aspiramos; en todo el espectro… Vamos a hacer una reforma tributaria, con el consenso también, nunca será una actitud medalaganaria,» afirmó.

Una de las propuestas que ha hecho en torno a esa reforma, que también será arancelaria, es la de rebajar el Impuesto Sobre la Renta para colocarlo en 15%. «Tiene muchas deficiencias, es muy alto en este país. Esperamos democratizar eso para involucrar a todo el mundo que pueda pagar,» dijo.

Señaló que llegará a acuerdos con el sector privado y los organismos internacionales, además de que con motivo del TLC tendrá que bajar todos los aranceles con Estados Unidos y algunos países de América Central.

Respecto a las medidas que tomará para no tener problemas con las recaudaciones, Mejía dijo que tiene planificados algunos mecanismos pero que tendrá que discutirlos con los sectores interesados y con el FMI.

Otra reforma que imperaría sería la de la ley de energía eléctrica. Aunque gracias a ella se intentaría suprimir a las distribuidoras, Mejía no quiso decir qué pasará con Edenorte y Edesur.