Por: Reynaldo Peguero
Santiago 2023 acumula amplias luces que irradian sus desafiantes sombras. Avances sustanciales combinados con retos. Todos solucionables si nueva vez armamos una alianza mutuamente beneficiosa entre Gobierno nacional, Ayuntamiento Municipal y sociedad civil asociada al Consejo para el Desarrollo Estratégico (CDES) y Compromiso Santiago.
Este 2023 ha sido muy bueno para Santiago, el 2024 será mejor. La ciudad con las propuestas más planificadas del Caribe y Centroamérica, al fin logra una dinamizadora inversión pública y privada. Mejor, un gasto público inteligente que motoriza, la inversión privada sostenible.
Los fieles proyectos públicos de agua, saneamiento, cuencas, vialidades, espacios públicos, parques y movilidad, coinciden con nuevas edificaciones privadas. Es una dinámica, que debe seguir sin parar. La nueva estructura física y tecnológica del monorriel y teleférico, modernas vías centrales, rescate del río Gurabo y miles de habitantes que residían en áreas vulnerables con apartamentos confortables; se suma a construcción de hoteles, hospitales privados-públicos y nuevos centros financieros y abasto.
Santiago evidencia más de $15 mil millones de inversión pública directa en 2023. Sumados a la inversión en vialidad y equipamiento comunitario de la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana (EGEHID) en San José de las Matas, Jánico, Sabana Iglesia y Baitoa, por $10 mil millones.
El Plan Estratégico Nacional Salud 2030, formulado, apuntaló diversos centros y equipamientos en Santiago. CEPAL, FMI y Banco Central coinciden que Latinoamérica evidencia inflación moderada y desaceleración económica. Para RD, la inflación es 4.41%, proyectándose un crecimiento económico alrededor del 5% para 2024.
Zonas francas crecieron 7.3 %, más de 196,000 nuevos empleos, 37% concentrado en Santiago, 72,520 nuevos trabajadores. Se suman 1.4 millones de pasajeros que circularon por el Aeropuerto Internacional del Cibao (AIC), donde 50% son dominicanos de la diáspora que consumen servicios culturales, gastronómicos y de salud.
Principales sombras en Santiago son: i) crítica relación con Haití que afecta mercado de productos de canasta básica y materiales de construcción; ii) nuevas edificaciones eliminan parte verde del suelo urbano y reducen permeabilidad. Se generarán inundaciones en sistema pluvial de más de 70 años de construido; iii) accidentes de tránsito mortales, causados por más de 190 mil motociclistas que usan cascos cuando les place. Unas elecciones municipales y nacionales despejadas y eficientes, como se espera, son contexto decisivo.
Asimismo la activa gestión para lograr plan estratégico binacional entre Dajabón y Ouanaminthe. También, implantación concertada del Plan de Ordenamiento Territorial de Santiago (Resolución 3240), con normas coherentes con Ley de Ordenamiento 368-22. La declaración de zonas de veda para construcciones en áreas vulnerables a sismos e inundaciones, será vital.