Con un elegante acto, los propietarios de la farmacia Ada celebraron sus 25 años de servicios en el mercado local. Bienvenido Rafael Antonio, presidente del Grupo Ada, tuvo a su cargo las palabras centrales, mientras que la bendición correspondió a Crispín Payano, sacerdote que invocó al Creador para que derramara éxitos en la empresa.

Al hablar sobre el tiempo de servicio de la farmacia en el país, el presidente de la firma destacó que en el transcurso de este tiempo han tenido muchos obstáculos, los que afirmó han superado.

Se refirió a los establecimientos que tienen en el sector de Capotillo, sector con el que afirmó mantienen un estrecho vínculo. «Hoy he desarrollado un estrecho vínculo con el sector de Capotillo, a quienes llamo mis aliados, mientras que la farmacia desarrolla una mística de trabajo que se identifica con las personas humildes y tratamos de que en la medida en que el negocio avance, los empleados también lo hagan. Con esta filosofía hemos logrado un equipo que responde profesionalmente».

Durante el acto los empleados de la farmacia recibieron regalos de los suplidores, así como pergaminos de reconocimiento por su antigüedad y aportes a la empresa. El presidente de la empresa, Bienvenido Rafael Antonio, recibió una placa de reconocimiento de parte de sus empleados, en la persona de Ramona Villa, la más antigua de todos, quien en representación de los demás lo definió como un ejemplo del trabajo.