Cy Young es el único lanzador Salón de la Fama que suma 500 victorias de por vida, lo cual representa el club más exclusivo del béisbol. Y por ahora no tendrá compañía, si es que la llega a tener algún día.

Young y Walter Johnson son los únicos serpentineros en la historia que han registrado más de 400 triunfos, otra cifra que parece estar fuera del alcance de los pitchers de la actualidad.

Incluso 300 victorias – el estándar moderno de la excelencia, el número mágico para que un lanzador asegure su entrada a Cooperstown – parece ser mucho pedir para los abridores de hoy en día, quienes están acostumbrados a lanzar menos entradas con menos frecuencia. Hoy por hoy, llegar a las 300 victorias requiere una larga carrera libre de lesiones y definida por consistencia, supremacía y buena suerte.

Quizás lo que hacen tan prestigioso a ese club son su caracter esquivo y la incertidumbre acerca de su futuro. Sólo 24 lanzadores en la historia han sumado 300 victorias o más y ese número podría no cambiar por largo tiempo. De los lanzadores activos, sólo Andy Pettitte, de 40 años de edad, tiene más de 200 victorias de por vida. De los pitchers que aún no cumplen los 30 años, Justin Verlander es el que más triunfos tiene con 124.

Randy Johnson fue el último lanzador que se unió al club, hazaña que logró en el 2009. Tom Glavine alcanzó esa cifra en el 2007, tres años después de que lo hiciera Greg Maddux.

A primera vista, CC Sabathia parece tener las mejores posibilidades de cualquier lanzador activo. El zurdo de 32 años de edad suma 191 victorias y se ha apuntado al menos 11 triunfos en cada una de sus 12 temporadas en la Gran Carpa.

Pero los abridores de por sí tienden a ser frágiles. Brandon Webb se apuntó 40 victorias del 2007 al 2008, pero no lanza en Grandes Ligas desde el 2009, temporada en la cual hizo apenas una presentación. El serpentinero de 33 años suma 87 victorias ahora mismo. El dominicano Bartolo Colón tuvo ocho temporadas consecutivas con 14 triunfos o más. En el 2005, ganó el premio Cy Young de la Liga Americana al terminar con 21 victorias, lo cual llevó su total de por vida a 139. Pero en los últimos siete años desde entonces, ha registrado apenas 32 victorias, en parte debido a una lesión en el hombro.

Las esperanzas de Roy Halladay de alcanzar las 300 victorias disminuyeron considerablemente en el 2012, campaña en la cual estuvo entorpecido por las lesiones y tuvo marca de 11-8. El lanzador de 35 años necesita 101 victorias para llegar a la cifra redonda de 300.

Es obvio que mantenerse sano es la mejor ventaja que un pitcher puede tener. 

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Lo que ayuda

Jake Peavy logró 80 victorias antes de cumplir 27 años, pero las lesiones y la inconsistencia lo han entorpecido desde entonces. Ahora, a cuatro meses de cumplir 32 años, suma apenas 120 triunfos de por vida. Lanzar por un equipo exitoso ayuda mucho.

Mike Mussina, quien se retiró hace cuatro años después de una campaña en la cual logró 20 victorias y necesitando sólo 30 para las 300, ganó al menos 11 partidos todos los años de 1992 al 2008. Su equipo tuvo un récord ganador en 13 de esas 17 temporadas.