En la cocina de los amantes del arte culinario nunca deben faltar especias y condimentos para crear las más deliciosas comidas. ¿Has pensado en cultivar tus propias hierbas aromáticas y así siempre tenerlas frescas y listas para usar? Te presentamos 4 hierbas aromáticas fácilmente cultivables en tu cocina. ¡Échales un vistazo!

Cilantro:

El cilantro es clave para adobar todo tipo de platillos salados. «Es una planta que normalmente se encuentra en los lados de los caminos, y en los campos no cultivados desde el llano hasta las zonas submontañosas», dice Eugenio G. Vaga en su libro: Plantas aromáticas y medicinales en la cocina.

Puedes plantarlo desde cero con semillas o aprovechar el que compraste en el súper que ya tiene raíces. Con mantener la tierra húmeda y varias horas de sol al día, podrás disfrutar de la cosecha de esta hierba aromática por mucho tiempo.

Además, «sus frutos, bien machacados, se recomiendan para la aerofagia, la falta de apetito de origen nervioso, en dolores de cabeza debido a malas digestiones, entre otros males del cuerpo», confirma el autor.

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Romero:

¿A quién no se le hace la boca agua con un pan con romero? «Esta exquisita hierba aromática es fácilmente cultivable en huertos, jardines, hasta en macetas. Incluso, crece espontáneamente en las zonas marítimas, en los terrenos arenosos-secos y soleados, desde el llano a la montaña», confirma Vaga.

Esta especia es fanática de la luz por lo tanto asegúrate de garantizarle al menos 6 horas de sol al día, así lo asegura Marta Rosique, creadora de Plante tu vida en verde.

“El romero es una planta aromática que posee diversas propiedades gracias a su acción tónica, estimulante, antiséptica, diurética, cicatrizante y antimicrobiana. Asimismo, también proporciona efectos hepatoprotectores y gastrointestinales, ayudando a mejorar la digestión de los alimentos, sugiere la nutricionista Tatiana Zanin.

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Albahaca:

En una espectacular salsa pesto o una ensalada, la albahaca es una especia que hace maravillas. Es capaz de convertir un plato aburrido en una obra de arte.

La alhábega, como también se conoce, «es una planta herbácea anual, apta para climas muy templados. Es de olor fuerte, agradable y un poco picante. Se cultiva en huertos y jardines. Igual que el romero, esta planta demanda de una buena dosis diaria de rayos solares», afirma Vaga.

¿Al final del día te quedas sin energía? Esta hoja puede ayudarte. «Es útil para quitar el hipo, disminuir la somnolencia luego de las comidas causadas por una laboriosa digestión y se emplea como tratamiento de la debilidad nerviosa», agrega el escritor.

“Las propiedades de la albahaca incluyen su acción antiespasmódica, digestiva, vermífuga, antibacteriana, fungicida, insecticida, astringente, cicatrizante, febrífugo, estimulante, anti-emético, antitusígeno y antiinflamatorio”, de acuerdo a Manuel Reis de Tu a Saúde.

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Orégano:

«Es una planta perenne de agradable aroma que crece en los alrededores de los bosques, en lugares no cultivados, en los pedregales, desde el llano a las zonas montañosas», describe Vaga.

La especie necesitará una maceta con buen drenaje. Solo necesitará agua cuando la tierra esté seca. Aquí tenemos otra admiradora del sol, señala Mer Bonilla.

“El orégano también se puede consumir en forma de té o utilizarse como aceite esencial por sus propiedades antioxidantes, antimicrobianas y antiinflamatorias”, explica Zanin

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Esperamos te animes a usar estas 4 hierbas aromáticas más a menudo en tus platillos. Te aseguramos que le darán un toque especial a cada plato que prepares.