La Semana Santa es para muchos sinónimo de sol, playa y arena, siendo las actividades al aire libre la favorita de muchos, sin embargo, estas casi siempre implican una alta exposición al sol lo cual podría generar daños en tu piel si no la cuidas de manera apropiada.
Es esta la razón por la cual te traemos esta serie de consejos y precauciones que te ayudarán a cuidarte mientras disfrutas entre amigos o familiares del fin de semana largo.
Beber suficiente agua
Mantenerse hidratado es clave para tener una piel radiante y con buen aspecto, por lo que tomar agua de manera constante podría ayudarnos a prevenir y contrarrestar un aspecto deshidratado.
Según estudios realizados por Mayo Clinic, se determinó que la ingesta adecuada de agua es de aproximadamente 3,7 litros de líquidos al día para los hombres y 2,7 litros para las mujeres. En ese mismo sentido, se recomienda también cuidarse de los excesos de bebidas alcohólicas.
Utilizar protector solar
Un paso fundamental para asegurar el cuidado y la protección de la piel durante estos días de asueto, es aplicar protector solar por lo menos 30 minutos antes de su exposición al sol, y recordar su debido retoque cada dos horas, pues de esa manera se puede reducir el riesgo de contraer cáncer de piel, se retrasa el envejecimiento cutáneo, te proteges de las quemaduras que puede provocar la exposición a los rayos UV y se evita la aparición de manchas, según recomendaciones hechas por la marca NIVEA.
También es importante evitar el uso de protectores con Factor de Protección Solar (SFP por sus siglas en inglés) menor a 50, ya que su cobertura y protección es muy baja y poco prolongada.
Humectar bien la piel luego de haberse expuesto al sol
La exposición a los rayos del sol puede provocar deshidratación en la piel, lo que resulta en resequedad o la descamación de la misma. Es por esto que se recomienda humectarla antes y después de haberse expuesto. Utilizar una crema humectante adecuada para nuestro tipo de piel ayudará a mantener la barrera de humedad natural en la piel y la protegerá de los rayos UV.
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Evitar los peelings, ácidos o productos provoquen sensibilidad
Los peelings, que pueden incluir ácidos y exfoliantes químicos, eliminan las capas externas de la piel, dejándola más suave y liza, sin embargo, también la vuelven sensible y vulnerable ante los rayos del sol, lo que puede resultar en lesiones graves.
Evita el uso de perfumes y/o manipular limón
El uso de perfumes que contienen alcohol tienden a aumentar la sensibilidad de la piel ante el sol, lo que podría resultar en quemaduras o manchas en la piel. Lo mismo ocurre con el limón el cual por su parte además de manchar la piel, también podría provocar irritación, enrojecimiento y hasta ampollas.