El champiñón es un ingrediente muy común en casi cualquier gastronomía mundial, siendo parte importante de una gran variedad de recetas de todo tipo. Es un hongo que se cultiva para su empleo en la cocina.
Los champiñones son uno de los tipos de hongos más consumidos, son económicos, versátiles y capaces de aportar equilibrio a un plato, sea por suavizarlo o por potenciar su sabor.
A todos esos beneficios, y a la accesibilidad que ofrece en el mercado, hay que sumar que los champiñones son nutritivos y saludables, aportan muy pocas calorías y son saciantes, así que pueden estar en la dieta de quienes mantienen una alimentación equilibrada y también de quienes llevan un régimen de adelgazamiento.
Los champiñones son ricos en fibra, vitaminas tan importantes como C, D o B6 y minerales como el potasio, por lo que es un alimento que es conveniente tener presente a la hora de pensar en nuestra alimentación.
Hoy vamos a ver cinco interesantes recetas que podemos elaborar con champiñones. Estos se pueden consumir ya sean frescos o secos.

recetas

Champiñones con pollo salteado
1 libra de champiñones medianos
2 pechugas de pollo sin hueso cortadas en cubos pequeños
1 cebolla cortada en juliana
4 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
4 cucharadas de mantequilla
1/2 taza perejil muy finamente cortado
Sal y pimienta al gusto
Preparación. Corte los champiñones en mitades en un sartén caliente el aceite de oliva y la mantequilla a fuego moderado; agregue la cebolla y el ajo; cocine por 4 a 5 minutos, o hasta que la cebolla ablande. Agregue el pollo; saltee la mezcla por 6 minutos, removiendo sin parar. Añada los champiñones y sofría por 4 minutos a fuego medio alto sin dejar de remover. Corrija de sal y pimienta; adicione el perejil y remueva hasta unificar los ingredientes.

Tallarines con champiñones
1 libra de tallarines
1/3 de champiñones
1 manojo de albahaca
2 cucharadas de piñones
Aceite de oliva virgen extra
Un diente de ajo
1 taza de queso parmesano
1/2 libra de jamón serrano en tacos
Un chorrito de vino blanco
Preparación. Para hacer el pesto, trituramos en el vaso de la batidora unas hojas de albahaca, piñones y queso parmesano, añadiendo el aceite necesario para formar una pasta no demasiado espesa. Reservamos el pesto. Para hacer la salsa de champiñones, los cortamos en cuartos y los salteamos en una sartén con aceite de oliva y un ajo fileteado. Añadimos tres hojas de albahaca picadas como si fuera perejil, un chorrito de vino blanco y los taquitos de jamón, apagando cuando los champiñones estén tiernos. Reservamos la salsa. Cocemos la pasta siguiendo las indicaciones del fabricante. Cuando está lista, la escurrimos ligeramente y la mezclamos con el pesto que teníamos reservado. Repartimos la pasta con el pesto en cuatro platos. Rematamos la receta de pasta sirviendo los champiñones sobre cada plato. Espolvoreamos con el resto de queso parmesano y llevamos a la mesa. Es preferible consumir de inmediato para evitar que se sequen.

Champiñones al ajillo

1 taza de champiñones laminados
2 dientes ajo
Perejil fresco
Pimienta, sal
Aceite de oliva
Zumo de limón
Preparación. Sofreímos en una sartén con aceite los ajos y el perejil muy picaditos, añadimos los champiñones, removemos, salpimentamos y añadimos un poco de zumo de limón, dejamos hacer de ocho a diez minutos a fuego medio.

Champiñón relleno de beicon y queso
1 bandeja champiñones grandes
Queso rallado
Taquitos de beicon (tocineta)
La cantidad de queso y beicon dependerá de la cantidad de champiñones
Sal
Preparación. Precalentar el horno a 200º, lavar los champiñones y vaciarlos. Se guarda el resto para hacer una crema o lo que se quiera, salarlo a gusto, rellenar de queso y beicon y poner queso por encima. Ponerlos en una fuente de horno y hornear hasta que estén dorados, el tiempo dependerá de cada horno.

Ensalada de champiñones con cebolla

3 tazas setas troceadas
1/3 de taza de cebolla fileteada
4 cucharadas de aceite de oliva
2 cucharadas de mantequilla
4 corazones de lechuga
1 taza de queso parmesano rallado
Preparación. Se saltean los champiñones con la cebolla en una sartén caliente a fuego alto con el aceite de oliva, se agrega la mantequilla y se salpimienta. Cocina hasta que notes que caramelizan ligeramente. Apaga el fuego y reserva. Enfría ligeramente, emplata, agrega la lechuga y esparce el parmesano.