BAGDAD (AP) En uno de los enfrentamientos más encarnizados desde que finalizó la guerra, tropas estadounidenses repelieron ataques simultáneos en la ciudad norteña de Samarra el domingo, con un saldo de 46 iraquíes muertos, 18 heridos y ocho capturados, informó el ejército de Estados Unidos. Cinco soldados estadounidenses y un civil resultaron heridos.

Minutos después, dos contratistas surcoreanos murieron en una emboscada, en lo que voceros estadounidenses consideran parte de una nueva campaña para socavar el apoyo internacional a la ocupación de Irak liderada por Estados Unidos. Los ataques durante el fin de semana mataron a siete españoles, dos diplomáticos japoneses y un trabajador petrolero colombiano. Dos soldados murieron en una emboscada.

Dos convoyes logísticos estadounidenses entraban en Samarra cuando recibieron ataques con bombas, armas cortas, morteros y lanzagranadas. Los ataques, uno en el distrito oriental de la ciudad y otro en el occidental, fueron simultáneos y aparentemente coordinados, dijo el teniente coronel William McDonald, de la 4| División de Infantería.

Tras levantar una barricada para interceptar un convoy, los atacantes abrieron fuego desde tejados y callejones. Los soldados devolvieron el fuego con armas cortas, cañones de tanque de 120 mm y cañones de blindados de combate Bradley. El fuego destruyó tres edificios donde se parapetaban los atacantes, dijo McDonald.

En otro ataque, una hora más tarde, cuatro hombres con dispararon con fusiles automáticos contra un convoy de ingenieros militares. Al devolver el fuego, los estadounidenses hirieron a los cuatro hombres, en cuyo _un BMW negro_ auto hallaron luego fusiles Kalashnikov y lanzagranadas.

Ningún soldado estadounidense sufrió una herida peligrosa, dijo McDonald. Dos sufrieron heridas menores y los otros tres fueron evacuados junto con el civil.

Samarra se encuentra 100 kilómetros al norte de Bagdad en el llamado Triángulo Suní, donde la oposición a la ocupación encabezada por Estados Unidos ha sido más encarnizada.

Comandantes estadounidenses dijeron que los insurgentes intentan quebrar la voluntad de la coalición aliada, pero aseguraron que el intento fracasará. Sin embargo, un influyente senador estadounidense dijo que los ataques podrían alcanzar su objetivo, e inclusive obligar a Estados Unidos a abandonar Irak.

Consultado acerca de las últimas emboscadas en Irak, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld, dijo que no cree que esos ataques hagan abandonar su misión a los aliados de Washington.

«Los países que tienen fuerzas allí reconocen que se trata de un sitio peligroso y que hay terroristas que están matando e hiriendo a personas. No sólo a fuerzas de la coalición, sino a iraquíes, en números crecientes», dijo Rumsfeld el domingo.

Un contratista colombiano murió y dos resultaron heridos cerca de la población de Balad, dijo el domingo el ejército de Estados Unidos.

El vocero del ejército de Estados Unidos, teniente general Mark Kimmitt, dijo que un ciudadano colombiano empleado por la empresa Kellogg, Brown and Root, murió el sábado en la emboscada a una caravana. Insurgentes dispararon con armas pequeñas contra la caravana cerca de la población de Balad, a 72 kilómetros al norte de Bagdad. Otros dos colombianos resultaron heridos en el ataque, dijo Kimmitt.

Kellogg, Brown and Root dijo en un comunicado que un empleado que trabajaba en labores destinadas a restablecer la infraestructura petrolera de Irak murió de un balazo cuando una caravana de cinco vehículos fue atacada cerca de Kirkuk, a 170 kilómetros al norte de Balad. Otro empleado y un subcontratista también fueron heridos, indicó.

Entre tanto, la agencia noticiosa Yonhap de Corea del Sur informó el domingo que insurgentes mataron a dos empleados surcoreanos e hirieron a otros dos cerca de Tikrit, en Irak.

También el domingo, se informó que los insurgentes mataron a dos soldados de Estados Unidos.