7 días de cine
Soñadores en busca de la felicidad

<p><strong>7 días de cine<br/></strong>Soñadores en busca de la felicidad</p>

POR ARTURO RODRÍGUEZ FERNÁNDEZ
Se dice que este es el año de los latinos en cuanto a logros cinematográficos se refiere y en nominaciones acumuladas para el Oscar y otras importantes premiaciones.  Sin embargo, es también el año de los morenos como lo fuera aquella vez en la que Denzel Washington y Halle Berry compartieron la estatuilla.

Si bien “Dreamgirls” quedó fuera de competencia en el renglón de mejor película del año, alcanzó la suma de ocho nominaciones, más que ninguna de las cinco películas que sí obtuvieron dicha nominación. Will Smith está nominado como mejor actor por “The pursuit of apiñes”. Jennifer Hudson está nominada como mejor actriz secundaria por “Soñadoras” (Dreamgirls). Eddie Murphy está nominado como mejor actor secundario por “Soñadoras” (Dreamgirls). Forrest Whitaker está nominado como actor principal por “El último rey de Escocia”.  Y quedan otros renglones y otros nominados que no mencionaremos porque hay otros puntos que deseamos tratar.

Tanto “Dreamgirls” como “En busca de la felicidad” han llegado a nuestras carteleras.

“Dreamgirls” fue un gran éxito hace décadas cuando se presentó en Broadway como espectáculo musical. Entonces se decía, y se sigue diciendo, que su historia estaba basada en lo que sucedió con aquella legendaria agrupación que fuera The Supremes y de la que Diana Ross formaba parte.

Cuando en uno de estos grupos empieza a destacarse alguien, surgen las rivalidades y las complicaciones. Todos sabemos que Diana Ross se convirtió en una gran estrella y que se lanzó como solista alcanzando grandes éxitos. En el cine tuvo una actuación impresionante en “El ocaso de una estrella” (Lady sing the blues) encarnando a Billie Holliday. Después ya no le fue tan bien porque, aunque el tema musical de “Mahogany” fue un gran éxito, la película no fue muy bien recibida por la crítica. Tampoco resultó la adaptación de “The whiz” hecha para la pantalla que dirigiera Sydney Lumet con ella y con Michael Jackson.

Fuera de las fronteras de Broadway, el público no estaba por aceptar a una Dorothy tan crecidita. Después, Diana se casó con un millonario nórdico, se alejó de las tablas y empezó otra vida. Pero ahora, lo que nos interesa es su conexión con “Dreamgirls” y el hecho de que el mundo del espectáculo ha dado origen a muy buenas películas, algunas tan excepcionales como “All that jazz” y “Cantando bajo la lluvia”.

Los intérpretes de color, además de la Diana Ross ya mencionada por “Lady sing. the blues”, han recreado las vidas de sus leyendas musicales de forma tan extraordinaria como hiciera Jaime Foxx con “Ray”, donde a propósito se ganó merecidamente el Oscar.

Era casi la reencarnación de Ray Charles.

No todo, sin embargo, ha sido triunfo y gloria, ya que una de las peores películas de todos los tiempos, y aquí no caben discusiones, es aquella “Glitter” que protagonizara una Mariah Carey que debería mantenerse alejada de las cámaras para toda su vida. La otra película mencionada, que entra a nuestros cines, es “En busca de la felicidad”. La protagoniza Will Smith y en ella debuta su pequeño hijo Jaden.

Smith es otro de los actores de color que ya habían sido nominados por sus caracterizaciones de estrellas de la vida real. En su caso le tocó hacer de Cassius Clay, de “Alí”,  aunque a nosotros nos ha convencido más en otras actuaciones de su carrera.

Ahora vuelve a estar nominado y su actuación, aunque tiene pocas posibilidades de ganar la estatuilla, resulta ser sobresaliente.

Vamos a escribir sobre ella.

LA BUSQUEDA DE LA FELICIDAD

(Título original: The pursuit of happiness, Dir: Gabriele Muccino, Int: Will Smith, Jaden Smith, Thandie Newton, Brian Howe, James Karen, Dan Castellaneta)

Las relaciones de padre e hijo han sido tan importantes en la pantalla que pudiéramos escribir páginas y páginas sobre ellas. Paul Newman dirigió una película titulada “Padre e hijo” (Harry and son) y ese era el tema central de “Tribute”, aquella cinta con el desaparecido e insustituible Jack Lemmon.  “La búsqueda de la felicidad” nos acerca, sin embargo, a dos películas muy definidas que abordan este tema. Una de ellas es “El ladrón de bicicletas”, clásico neorrealista de Vittorio De Sica. La otra, “Kramer contra Kramer” de Robert Benton.

Ya no se roban bicicletas a estas alturas y tampoco se las robaban en el Nueva York de los ochenta. Pero se podían robar cosas más extrañas y sofisticadas como un scanner que hiciera las mismas funciones, pero mejoradas, de los rayos X. Y también, pese al capitalismo y el desarrollo, se pasaba hambre, miseria y necesidad.

Smith se esfuerza, a lo largo de toda esta cinta basada en un hecho verídico, por echar para adelante, enfrentándose a todas las adversidades y en poder permanecer junto a su hijito.

Es una lección de perseverancia la que nos ofrece este bello filme que, aunque la roza, nunca cae en la sensiblería pero tampoco deja de complacer al gran público. Además, lo que sobresale en la película, es la estupenda actuación de un Smith absolutamente creíble y convincente.

Calificación: 4 (Muy buena)

Publicaciones Relacionadas