LIMA (AFP).- El ministro de Agricultura de Perú, José León, dijo el domingo que la producción anual de hoja de coca en Perú es de 52.000 toneladas, de las cuales 43.000, o sea el 81%, «están vinculadas al narcotráfico».

El ministro León precisó que del total de cosecha anual, tres mil toneladas son compradas a los agricultores cocaleros por una oficina del gobierno y otras seis mil se quedan para el ‘chacchado’ (masticación) de los comuneros andinos, continuando una tradición de siglos.

«Pero hay 43 mil toneladas que están vinculadas definitivamente al narcotráfico, y si (los campesinos) queman la hoja es para hacer pasta básica de cocaína», dijo el ministro a Radio Programas del Perú al afrontar desde su sector la actual protesta de cocaleros en Lima y en la Amazonía nororiental.

León dijo que el gremio de labriegos de la hoja de coca «tiene que definir con claridad su agenda: son gremialistas o están en una actitud política negativa».

Los cocaleros exigen al gobierno poner fin a los programas de erradicación forzosa de la hoja de coca -materia prima utilizada para la cocaína- argumentando que el plan de sustitución de cultivos ha fracasado debido a los bajos precios de los nuevos.

Desde 1985, cuando Perú tuvo el pico de 140.000 hectáreas sembradas con coca, «producto de la alianza narcoterrorista», se ha eliminado el 75%, según el ministro de Agricultura.

El gobierno considera que la política de erradicación forma parte de la lucha frontal contra el narcotráfico.

En tanto, fuerzas combinadas del ejército y la Policía desbloquearon en la víspera las carreteras que afectaban el ingreso a la ciudad amazónica de Tingo María, 550 km al este de Lima, lanzando bombas lacrimógenas y disparos al aire, en tanto las turbas respondían con piedras y múltiples objetos.

No hubo víctimas de gravedad. Las autoridades de Tingo María confirmaron que mantienen detenidas a 12 personas.

El escenario violento creado por la demanda de los cocaleros tendrá un elemento adicional que puede exacerbar los ánimos. El abogado del dirigente Nelson Palomino, máximo líder cocalero, anunció que este lunes un tribunal dictará sentencia a su patrocinado.

Palomino se encuentra preso desde el año pasado en una cárcel de Ayacucho y el fiscal Henry Ordóñez ha solicitado 24 años de prisión por una acumulación de supuestos delitos, entre ellos el de apología del terrorismo, secuestro, extorsión.

«No sé si habrá muertos o toma de rutas, pero no vamos a quedarnos de brazos cruzados», advirtió en Lima Elsa Malpartida, líder de cientos de cocaleros que llegaron a la capital el 3 de mayo tras un marcha de sacrificio desde la selva central para exigir al gobierno cambios de su política respecto a la coca.