92 años que mataron a Mon

92 años que mataron a Mon

Por Mon se conoce el general mocano Ramón Cáceres, un complotado del 26 de julio de 1899 contra el coloso del coraje Ulises Heureaux (Lilís). Mon ascendió a la presidencia de la República en el 1906 y estableció su mandato apoyado en la austeridad, la seriedad, la honradez y con el más absoluto apego al orden de las instituciones de la nación, que por seis años le tocó gobernar sin «Pensar Perpetuar Hambre».

Tuvo Mon, que adoptar medidas de excesivas fuerzas que irritaron los ánimos populares. Siendo las principales las concentraciones poblacionales en la provincia de Montecristi; el extermino de los abundantes ganados vacunos y caprinos de la Línea Noroeste, fuentes de sustento alimentario para las guerrillas montaraces que operaban en esas belicosas comarcas. También en los inicios del gobierno de Mon, ocurrió en Guayubín una horrorosa matanza de hombres de armas perpetrada con una sangre fría espantosa por el truculento general Manolo Camacho.

También cargó el gobierno de Mon con la Convención Domínico Americana de 1907, en virtud de la cual los Estados Unidos, nuestros buenos vecinos, se adueñaron de nuestras aduanas.

Por otro lado el general Cáceres creó las fuerzas militares mejor organizadas, que hasta entonces había tenido la nación dominicana. Se trató de la famosa Guardia Republicana «La Guardia de Mon», que tuvo por comandante al joven general Alfredo María Victoria (gallo de pelea de la traba de Jacagua).

Las conspiraciones comenzaron a fraguarse contra el presidente Cáceres. Por eso, el 15 de febrero de 1908 el general Cirilo de los Santos (alias) Guayubín, el jefe de «Los Carpinteros», preparó en Los Higüeros jurisdicción de Cotuí, una reunión o junto de generales, bajo el disfraz de un bautizo. Dizque iba a ser cristianizado un hijo del general Guayubín y el padrino lo sería el general Luis Tejera, quien era el gobernador de la capital. Comenzó la fiesta bautismal un día antes, y un cohete que equivocó su camino, fue y chocó un saco de pólvora. Hubo una tremenda explosión. Perecieron la vida Guayubín y su hijo que se quedó sin bautizar.También muchos resultaron quemados y chamuscados.

Entonces las lenguas malas, lenguas de doble filos, dieron en decir que la fiesta en verdad se trataba de una conspiración contra el gobierno de Mon. Pero con todo, la real conspiración, la cual se convirtió en tragedia griega, tuvo efecto y lugar el domingo 19 de noviembre de 1911, se cumplieron ya 92 años. Esa gran tragedia resultó calificada por algunos, dentro del círculo fatal de «los enredos del destino». Entre los complotados se encontraban los generales Luis Tejera, Luis Felipe Vidal, Augusto Chotín, Pedro (Chichirí) Mejía y otros generales más. ¡Cuantos generales! Aquí había más…generales, que en la Rusia de los zares.

Los futuros magnicidas prepararon un manifiesto dirigido «Al Pueblo dominicano». Y según ellos, todo era «como medida expeditiva para iniciar la evolución, para evitar la revolución que estaría destinado a padecer el país».

Los futuros magnicidas en el primer párrafo de su manifiesto decían: «La captura del ciudadano presidente de la República viene a ser el primero de una serie de acontecimientos que se sucederán en el país, tendentes a realizar la evolución y si fuere necesario la revolución, que ha de echar las bases de un gobierno que se vincule en el franco y libre querer de las mayorías».

La tarde aciaga del domingo 19 de noviembre de 1911, trataron los conspiradores de hacer preso al presidente de la República general Ramón Cáceres.

Las cosas no salieron conforme a lo planeado y el presidente perdió la vida y Luis Tejera salió herido de gravedad. En Haina Tejera fue apresado y conducido a la Fortaleza Ozama ferozmente fue rematado a machetazos. Afirmándose que su padre Emiliano Tejera de manera solemne expresó: «Bien muerto, pero mal matado».

Los Victoria se quedaron con el poder (gobierno de los Quiquises). Vino la guerra al regresar Desiderio Arias del extranjero. En la Línea Noroeste se escribieron las páginas más sangrientas de la guerra contra los Victoria.

Y en Juan Calvo, Las Mercedes, El Pumpún, Chacuey y Dajabón, Desiderio fue el «varraco» cuando mataron a Mon.

El pasado 19 de noviembre de este año 2003, se cumplieron noventa y dos años que mataron a Mon, o sea el general Ramón Cáceres nativo de Estancia Nueva de Moca e hijo del general Manuel Altagracia Cáceres y Fernández, de prosapia azuana y con profundas ligazones con Buenventura Báez Méndez.

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