El día seis del presente mes de marzo, el presidente Danilo Medina anunció la escogencia de Margarita Cedeño de Fernández a repetir como vicepresidenta de la República en los comicios del 15 de mayo venidero, mientras Luis Abinader seleccionaba la siguiente día como compañera de fórmula a Carolina Mejía, definiendo el panorama electoral.
Ambos políticos demostraron en seleccionar sus compañeras en la boleta electoral sensatez, prudencia y correcta estrategia, porque en lo concerniente al gobernante, con la selección de Margarita, fortalece y dimensiona el apoyo de su esposo, el tres veces presidente Leonel Fernández, ponderando la alta cuota de adherentes y su innegable estrategia triunfal que ahora endosa a la reelección del presidente Medina.
Concerniente a la selección de Abinader en Carolina Mejía, potencializa el trabajo político de su padre, el ex presidente Hipólito Mejía, con su innegable cuota proselitista en el PRD original, ahora PRM, y adoba con un rostro nuevo, sangre nueva, que la sociedad clama en todo su escenario político y privado.
Los dos candidatos presidenciales a ganar, con la escogencia de dos damas para la segunda posición de mando político, demostraron cortejar y tener muy presente el valor y rol de la mujer en el accionar nacional, que también reclama la sociedad como una manera de propiciar su importancia y méritos preteridos por gobernantes y empresarios.
El escenario electoral queda completo con estas decisiones laudables del presidente Medina y el candidato presidencial del PRM Luis Abinader, y ahora la cuestión estriba en cómo Abinader formula su oferta al país, que no lo ha hecho, limitándose a censurar.
También, cómo Abinader consigue superar Bono Gas, Bono Luz, Visitas Sorpresas, 7% PIB, 2% inflación, control prima dólar, haitianización, corrupción.