Tomando en consideración los nuevos elementos agregados al marketing político no podemos ignorar la fuerza y el poder que representan los medios alternativos como valores agregados para asegurar que la opinión pública se genere mediante los medios y canales deseados para llegar al público meta llamado electores, votantes, de manera actúen inducidos por los contenidos diseñados y pensados por los asesores, especialistas en mercadeo de la comunicación quienes llevan el extremo interés de posicionar o aventajar a sus representados en una contienda electoral.

En este sentido los medios tradicionales cobran vida y relevancia como herramientas de poder persuasivo, sin las cuales no sería posible, alcanzar una victoria electoral, la televisión ha logrado amplios niveles de participación producto de la magia envolvente para entrar en contacto con el público como si estuvieran allí, los sonidos, los colores, las imágenes y las actuaciones estelares de los candidatos agrega un ingrediente o componente que captura en tiempo records la atención de los votantes, quienes de inmediato generan debates sobre el contenido o mensaje exhibido en pantalla.

La prensa escrita la cual sirve como un valioso documento a presentar a la posteridad a pesar de sus costos, es usada a título de páginas enteras como símbolo de fortaleza que pone en evidencia las debilidades económicas de los contrarios, aunque su contenido no sea contundente, lógico, cierto, llama la atención de los viejos y nuevos votantes, importando mucho la frecuencia con que se haga hasta asfixiar la competencia y así lograr la meta de alcanzar el poder político al precio más alto que se pueda pagar, según modelos tradicionales..

Los medios prensa por sí juegan un papel determinante además de la publicidad expresa, por los artículos y noticias que parecen no pagados, pero que en realidad son las más importantes, aseguradas y garantizadas a través de los periodistas pagados quienes las mantienen diariamente, mediante las novedades del candidato a vender al mercado electoral, asumiendo siempre la defensa de los intereses que representan, marcando la diferencia en diligenciar que salga la nota del día a como dé lugar.

La radio como medio electrónico y a pesar de que existen en grandes cantidades en la república dominicana transmiten en forma instantánea informaciones de contenidos electorales en lugares remotos y apartados de la civilización sin la necesidad de hacer mayores inversiones económicas, a mayor cantidad de pautas publicitarias más bajo es el precio, lo que permite a quienes puedan contar con mayores presupuestos, aun sin tener mejores propuestas o discursos o ningún plan o proyecto a beneficio de la sociedad, ganar por persuasión, convencimiento y manejo de los recursos económicos, es el objetivo principal, no importa su precio, impactando a la opinión pública en forma directa e indiscriminada a través de bombardeos publicitarios que terminan conquistando la preferencia electoral.

A esto agregamos la efectividad de la inmediatez de los medios virtuales y la redes sociales tales como facebook, twitter entre las principales con grandes niveles de usuarios en todo el mundo en forma rápida y contundente para el manejo de la opinión pública reduciendo costos publicitarios, al tiempo que incrementa la efectividad para manejar la voluntad y transformar los pensamientos de los que ya están decididos a votar por un determinado candidato y de aquellos indecisos que votan sin compromiso y sin razonar el voto, de aquellos que votan para no perder y se orientan casi siempre por y a favor de los más fuertes, con más capacidad de inversión en una campaña política.

Los periódicos digitales han logrado posicionarse rápidamente en el gusto de la gente, quienes desde la comodidad de sus hogares tienen la facilidad de navegar por cuantos medios les sea posible, en cada uno de esos espacios los usuarios encontrarán contenido marketing político, propuestas sobre determinados candidatos, quienes tienen como herramienta principal periodistas y colaboradores integrados a tiempo completo para producir la inducción del público a leer cada contenido acerca de sus candidatos, asegurando permanencia y vigencia de los mismos en tiempo records, con la mayor efectividad.

El papel estelar lo desempeñan los comunicadores sociales, la mayoría de las veces movidos por el afán irracional de obtener cuantiosos beneficios en los períodos electorales sin importar en lo más mínimo el futuro de la nación, aquí quedan en tela de juicio los valores y principios de los actores, capaces de hacer lo que fuere necesario para modificar la intención del voto de las masas, promoviendo con gran afán a quienes cotizan mejor la propaganda política en los diferentes espacios o medios de comunicación de masas.

Los políticos saben que los periodistas son mal pagados y los dueños de los medios de comunicación permiten el rejuego para que se busquen unos centavos adicionales que les permita vivir con ciertos niveles de dignidad, a sabiendas de todo el daño que causa tan repudiable nivel de permisividad y respaldo en complicidad, interpretándose con esto que lo que más importa es contar con unos pesos en los bolsillos.

Independientemente de las diferentes teorías y de la existencia de múltiples modelos comunicacionales, existen marcos de referencias que permiten conocer lo que piensa una determinada población respecto de X candidato, dentro de la estructura de campaña se analizan factores sociales, indicadores, muestras poblacionales que orientan a los analistas en las tomas de decisiones y redefinen líneas a seguir, las encuestas, poderoso instrumento que sirve para medir fortalezas y debilidades de los contendores candidatos, sugieren cambios estructurales y se toman acciones que encaminan al candidato al mejor perfil ideológico, todo para generar opinión pública cualificada, favorable y efectiva, para ganar sin error posicionamiento electoral, en todo esto, la comunicación política juega papel vital y los comunicadores sociales, representan la materia prima para transformar poco a poco lo que piensan las masas respecto de determinados candidatos a favor y en contra sin importar los medios por donde se manejen las informaciones, los contenidos tienen principalía, cuenta mucho lo que se dice, cómo, cuándo, a quién, dónde, por qué y no se pierde de vista ningún indicador respecto de los niveles de rechazos o aceptación por parte de los electores.

En sentido general los medios de comunicación son las herramientas más usadas para manejar una campaña política, su función siempre será la de generar opinión pública favorable, modificar los pensamientos de los votantes, posicionar el candidato, persuadir, convencer, inspirar a las masas, las cuales están siempre deseosas de recibir informaciones que les permita tomar una decisión electoral, es decir los medios de comunicación y los periodistas son determinantes en cada proceso y por eso vemos los periódicos y periodistas apartados de los intereses de las grandes mayorías centrados sólo en su momento de facturación hasta el término de la contienda.