¿Dónde están los 60 millones?.- Muchas son las expectativas que ha generado la investigación  que realiza la fiscalía de la provincia de Puerto Plata en torno al allanamiento realizado en Sosúa, en el que murió, en un supuesto intercambio de disparos, un ciudadano alemán  acusado de pertenecer, junto a varios  compatriotas, a una “peligrosa secta satánica”, y por el que fueron expulsados de la Policía  Nacional 14 de sus miembros,  incluidos los dos coroneles que comandaron el operativo. Esas expectativas se centran, fundamentalmente, en el destino de los 60 millones de pesos que según los alemanes fueron sustraídos  de su residencia durante el allanamiento, de donde también se desaparecieron –alegan– dos cajas fuertes, joyas, lingotes de oro y 27 relojes Rolex, entre otras pertenencias. ¿Realmente había todo ese dinero en esa casa? ¿Por qué  los fiscales actuantes no lo informaron de inmediato a sus superiores? Se supone que la participación de los representantes del Ministerio Público en ese allanamiento haría innecesaria esas preguntas, pero es evidente que no hicieron bien su trabajo y hasta es probable que actuaran   en connivencia con los agentes policiales hoy sancionados. No sería la primera vez que ocurre.  Pero habrá que esperar para saber si las pesquisas que realiza la fiscal de Puerto Plata, Alba Núñez, responden  todas las interrogantes que ha generado ese espectacular operativo, que al decir de los alemanes involucrados tenía como único propósito robarles su dinero y pertenencias con el cuento de la secta satánica como pretexto.  Por eso es tan importante que los resultados de esa investigación, a los que da cercano seguimiento la embajada alemana en la República Dominicana,  sean convincentes y creíbles, sin márgenes para la duda o la desconfianza, pues en este país sabemos por experiencia que cuando hay tanto dinero de por medio el principio de autoridad se disuelve y a la justicia se le caen los pantalones.