Científicos británicos criticaron los intentos gubernamentales de prohibir la creación de embriones híbridos de ser humano y animal, lo que -según ellos- interrumpirá la creación de terapias contra males hoy incurables.
Expertos de varias universidades del Reino Unido pidieron al ministerio británico de Salud y a la Agencia para la Fecundación y la Embriología Humanas una mayor «comprensión» de la labor científica que están tratando de desarrollar.
Los especialistas esperan poder transferir núcleos con ADN de células humanas a óvulos de origen animal, a los que se les ha extraído la mayor parte de su información genética.
El resultado sería un embrión híbrido con un componente humano del 99% y un componente animal mínimo.
Esto posibilitaría estudiar la aplicación de nuevas terapias para pacientes de enfermedades como el Alzheimer y el mal de Parkinson.
La próxima semana, la Agencia para la Fecundación y la Embriología Humanas estudiará una propuesta del ejecutivo británico que propone ilegalizar este tipo de experimentos.
Evitar la autorización a toda costa
Para Josephine Quintavalle, representante del grupo ético CORE, «la creación de los híbridos no debe aprobarse