La modalidad de enterrar a los jóvenes de los barrios en medio de música estridente, cerveza, whisky y drogas es evaluada por especialista de la conducta como una forma de expresión de ese núcleo de la sociedad que busca reconocimiento.

El ejemplo más cercano fue el entierro del cantante de música urbana Leonardo Michael Flores Ozuna, conocido como Monkey Black, donde miles de jóvenes y adultos ocuparon las calles con un comportamiento fuera de lo común.

De ahí que el psiquiatra José Miguel Gómez Montero manifiesta que es la expresión de una subcultura barrial que busca llamar la atención.

Mientras el padre Rogelio Cruz, quien es sociólogo de profesión, dice que ese comportamiento es un rechazo absoluto a los moldes sociales.