DUBLÍN, Irlanda. Gerry Conlon, quien fue encarcelado injustamente por un atentado del Ejército Republicano Irlandés e inspiró una película nominada al Oscar, ha muerto tras una larga batalla contra el cáncer.

Tenía 60 años. Su familia dijo en una declaración que Conlon falleció el sábado en su casa en Belfast.

Le rindieron tributo al hombre que ellos dijeron, “trajo vida, amor, inteligencia, ingenio y fuerza a nuestra familia en sus horas más difíciles”.

Conlon fue una figura central en uno de los más grandes errores de la justicia en Gran Bretaña. Él y otros tres fueron declarados culpables y condenados a cadena perpetua por el atentado de 1974 en un bar de Guildford, cerca de Londres, donde murieron cinco personas. Conlon se declaró siempre inocente e insistió en que la policía le había torturado para forzarle a confesar.

Su posición fue vindicada en 1989, cuando los llamados “cuatro de Guildford” fueron exonerados y liberados. Para entonces, su padre Giuseppe, condenado por un supuesto papel menor en el atentado, ya había muerto en la cárcel. Su perdón llegó en 1991.

La declaración de la familia dijo que la campaña de Conlon por la justicia “forzó al mundo a abrir los ojos ante la injusticia. Obligó a reconocer maldades inimaginables. Pensamos que eso cambió el curso de la historia”.

La autobiografía de Conlon, “Inocencia probada” fue la base de la película “In the Name of the Father” (En el nombre del padre) protagonizada por Daniel Day-Lewis como Conlon, en 1993. “Su pérdida se sentirá tanto en Belfast como en el resto del mundo, para todos quienes trabajan en favor de la justicia”, dijo el canciller irlandés Eamon Gilmore.

Alasdair McDonnell, un líder nacionalista moderado en Irlanda del Norte, dijo que la convicción y condena a 15 años de prisión a Conlon fue “terrible y atroz” y lo llamó “una luz brillante en búsqueda de la verdad”. A Conlon le sobreviven su compañera y una hija. No se informó nada sobre su funeral.