El profesor Juan Bosch afirmó en innumerables ocasiones que no era literato, que no le gustaba ese oficio, que se había dedicado a escribir cuentos, más bien, porque deseaba dejar constancia de que no aceptaba el falso criterio que tenían algunas personas del campesino dominicano.
Se decía, según comentaba el profesor, que el campesino de este país era vago, holgazán, embustero y vicioso. Por esa razón, desde que comenzó a escribir sus cuentos, defendió con su pluma y con su acción a la mayoría de esta población.
Coherencia en el discurso. “Su discurso iba de la mano con su manera de pensar”, aclara Mildred Guzmán Madera. En 1962 criticó el uso de vehículos de lujo a los que denominó “carros pescuezo largo” y 38 años después mantuvo su posición. En 1988, los miembros del partido de la Seccional de Estados Unidos le compraron un carro con motivo de su cumpleaños, obsequio que no aceptó.
“Yo no me monto en ese automóvil. He criticado siempre los ‘carros pescuezo largo’, que beben demasiada gasolina; así que se lo pueden llevar”, dijo.
Vanguardia del pueblo. Bosch revisaba y corregía el órgano del Partido de la Liberación Dominicana, “Vanguardia del Pueblo”, de arriba abajo. Se preocupaba de que los reportajes no tuvieran pase, con el objetivo de facilitar la lectura.
“Para las notas -destaca Mildred- utilizaba la parte posterior de los sobres usados, pues decía que el papel costaba dinero y era necesario economizarlo”.
Más sobre Mildred. Fue secretaria de la presidencia del Partido de la Liberación Dominicana, secretaria de Bosch, miembro del Comité Político y secretaria del Comité Central. En el 2007, fue galardonada con la Medalla al Mérito, otorgada por el presidente Fernández.
El presidente Danilo Medina la juramentó como embajadora Alterna de República Dominicana ante la ONU. Mildred procede de una conocida familia evangélica capitaleña, se integró al trabajo político alentada por su jefe y maestro. Su madre era descendiente del general Gaspar Polanco.