¡A comer naranja!

¡A comer naranja!

Existen numerosas variedades de naranjas con particularidades en su sabor, jugosidad, tamaño, condiciones de cultivo y productividad. Esto permite que se pueda elegir el tipo más adecuado para cada uso concreto; bien sea para su consumo como fruta de mesa, zumo o para la fabricación de distintos derivados.

 No todas las naranjas son ácidas. A través del sabor se clasifican en dos grandes grupos: amargas o dulces. A este último grupo pertenecen las naranjas sanguinas, que gracias a su sabor azucarado resultan muy adecuadas como naranjas de mesa.

 Las naranjas amargas, en cambio, tienen un sabor tan ácido que las deja reservadas a la elaboración de mermeladas y aceites esenciales. Las naranjas sanguinas mantienen y superan los beneficios de la naranja tradicional, ya que aportan más beta-carotenos y contienen antocianinas, unas sustancias que les confieren ese color rojizo tan característico.  Para aprovechar al máximo sus virtudes nutricionales y disfrutar de su sabor se recomienda tomarlas frescas, tanto solas como combinadas con otras frutas. Los zumos de naranja que se elaboran con esta variedad son exquisitos, ya que su sabor recuerda ligeramente al de las cerezas o las frambuesas.

Estas  al igual que los limones, se han utilizado ampliamente en las dietas de rejuvenecimiento. Además su elevado contenido en vitaminas C y otros componentes antioxidantes, estos son muy alcalinos, por lo que ayudan a depurar las toxinas del torrente sanguíneo.

Recetas

Mousse de naranja

Ingredientes:
2 naranjas
3 huevos
4 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de Cointreau 
1/4 de litro de nata
10 gramos de gelatina
4 cucharadas de miel
3 naranjas
4 cucharadas de Mantequilla, complementan la receta.

Preparación:

Lavar las naranjas, rallar la piel y exprimir el zumo. Remojar las hojas de gelatina en el zumo y calentar ligeramente para que se funda. Bata las yemas con el azúcar, los licores, el zumo, la nata, la ralladura de las naranjas y las claras batidas a punto de nieve. Llenar con la mezcla moldes semiesféricos y guardar en la nevera. Prepare un salsa con miel y naranjas para el final.

Lomos de langosta con naranja

Ingredientes:
1 cola de langosta 
2 naranjas
2 cucharadas de zumo de naranja
2 cucharadas de yogur natural
2 cucharadas de aceite
2 cucharadas de mostaza

 Preparación:

Cocer la langosta en agua hirviendo con sal por 10 minutos.

Pele las naranjas y cortarlas en gajos. Mezcle y bata bien la mostaza con el yogur, el aceite y el zumo de naranja.

Presentar en el centro del plato el lomo de langosta y los gajos de naranja. Verter por encima la salsa batida.

Qué tomar

CAIPIRIÑA

Ingredientes:
4 onzas de Cachara
3 a 4 gajos de lima
1 cucharada de azúcar

Preparación:

Ponga en un vaso bajo y ancho los gajos de lima y el azúcar. Machaque la lima con un aplastador o con el dorso de una cuchara. Agregue la Cachaça y el hielo picado.

Cómo elegirla

Las naranjas se comercializan maduras, ya que son frutas no climatéricas y a diferencia de otras, no se maduran una vez recolectadas. Los cítricos si son jugosos deben ser pesados, por lo que las naranjas que están en su mejor momento, resultan pesadas respecto a su tamaño. Desechar las que suenan huecas, presenten golpe u  olor a rancio.

 Cómo conservarla

Las naranjas que se comercializan en redes de 2 kilos suelen ser de clase I y II, mientras que las de clase extra se almacenan en cajas de madera y algunas de ellas se presentan envueltas en papel de celofán. Si las naranjas se van a consumir en poco tiempo, se pueden dejar en un frutero a temperatura ambiente. Pero en el caso de no ser así, para conservarlas más tiempo se recomienda guardarlas en la nevera.

 Cómo manipularla

Para evitar que estas se maltraten se recomienda que al momento de guardarlas no se han de apilar unas sobre otras. Procure disponer de un espacio en el que usted pueda colocar las naranjas una al lado de la otra,  manteniendo cierta separación entre ellas. Este es un consejo que ayudará a que estas se conserven por más tiempo.

Consejos

Trucos sobre la conservación de los alimentos

Guarda la verdura en la nevera, envuelta en la bolsa de plástico de la compra, durará mucho más, comprobarlo con los pimientos, las zanahorias, el perejil, el apio, las acelgas, las espinacas…

Las cebollas estropean las papas cuando están en contacto. Separarlas.

No cortes con cuchillo la lechuga, ni otras verduras de hoja, pues se oxidan y oscurecen. Córtala con las manos.

Cuando vaya a preparar pescado, tenga pendiente quitar las  escamas, seguramente no te va a gustar encontrarte las escamas en la boca.

Cuando prepares salsa de tomate, aprovecha y cocina la de toda la semana. Congela una parte y así la tendrás siempre a punto. Cuando la vayas a utilizar, saltéala en una  sartén, que has cocinado albóndigas o  paella, etc; de manera que tome el sabor de cada guiso.

Para preparar cualquier mermelada, hay que añadir la mitad de azúcar que de fruta (siempre bien madura) pelada y deshuesada. Es muy práctico que peses los desperdicios que vayas acumulando en una bolsa de plástico y lo restes del total de fruta. Para descongelar cualquier alimento, ya sea crudo o cocido, hazlo siempre dentro del refrigerador 24 horas antes. Saca los huevos de la nevera  solamente si estás seguro de utilizarlos.

Para preservar la verdura, cilantrico, es recomendable usar un papel periódico.

La cura en casa

La refrescante hoja de menta

La menta es originaria de Oriente, es una planta muy difundida en todas las latitudes y sus hojas han sido utilizadas por diversas culturas desde la más remota antigüedad por sus bondades. Es uno de las aceites más vendidos en el mundo.  Entre sus propiedades podemos mencionar que la mente es: un analgésico,  antiséptico, antiespasmódico, hepático, estimulante y estomático. La menta es muy usada en medicinas y cosméticos. Su aroma purificador es usado para inhalaciones, compresas, ingerido, evaporadores aplicado diluido para dolores de cabeza y para masajes. Sus hojas, tanto frescas como disecadas, tienen múltiples aplicaciones.  Resulta una hierba deliciosa para tomar en infusión y aromatizar vinagres y aceites.

Las hojas frescas añaden sabor a platos de papas, sopas y postres. Es una planta típica en la cocina inglesa, en platos de caza y cordero. Con la menta se pueden preparar varios licores, e incluso la sopa de menta, la cual tiene numerosos adeptos. Se elaboran caramelos, chicles, refrescos e incluso chocolate. Tiene muchas propiedades e indicaciones como planta medicinal, por ejemplo, se recomienda introducir un poquito de algodón empapado con una gota de esencia en la muela con caries y dolorosa. Sobre los nervios capaces de transmitir la sensación de dolor, la menta amortigua tal sensación. Administrada en forma de infusión, se preparan con 5 o 6 gramos de hojas por taza. Se pone a hervir el agua, se retira del fuego y la menta se echa únicamente cuando se ha extinguido el hervor. Se tapa y se espera a que disminuya lo suficiente la temperatura para que se pueda tomar. Se añade un poco de azúcar o de miel, a gusto de cada uno. Esta tisana, incentiva a la producción de jugo gástrico, favoreciendo las funciones digestivas del estómago. Otro uso es en inhalaciones para combatir el catarro, algunas bronquitis y laringitis, por su efecto antinflamatorio. La menta se usa también en diferentes pomadas.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas