Un juez federal estadounidense condenó este miércoles a varios años de cárcel a dos de los responsables de una campaña puesta en marcha en 2018 para recaudar fondos con el fin de ayudar a financiar el muro fronterizo propuesto por el expresidente estadounidense Donald Trump (2017-2021), por haberse quedado con parte de lo recaudado.
El exmilitar Brian Kolfage, un veterano de la guerra de Irak (donde perdió ambas piernas y parte de un brazo) y cara visible de esta iniciativa, fue sentenciado a cuatro años y tres meses en prisión tras admitir haberse quedado con parte del dinero obtenido a través de la campaña “We Build the Wall” (Construimos el muro).
Andrew Badolato, otro de los responsables que también se declaró culpable, fue condenado a tres años por participar en esta trama.
“Brian Kolfage y Andrew Badolato abusaron de la confianza de los donantes y robaron cientos de miles de dólares en donaciones para llenarse los bolsillos”, dijo en un comunicado el fiscal federal Damian Williams, que celebró que ambos hayan pagado por su “conducta criminal».
Los dos habían sido acusados de fraude en este caso junto al empresario Tim Shea y el conocido estratega político y antiguo asesor de Trump Stephen Bannon.
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Shea, que optó por ir a juicio, fue hallado culpable y está a la espera de conocer su sentencia, mientras que Bannon se libró de este proceso gracias a un indulto que le dio el expresidente en su último día en el cargo.
Bannon, considerado el gran artífice de la llegada de Trump a la Casa Blanca, se enfrenta aún en el estado de Nueva York a una acusación de lavado de dinero, conspiración y fraude por este mismo caso, dado que el perdón presidencial se aplica a posibles delitos federales, pero no estatales.
“We Build the Wall” recaudó más de 25 millones de dólares con el supuesto fin de apoyar la promesa electoral de Trump de construir una barrera en la frontera con México, que en aquel momento se estaba encontrando con muchas dificultades para ser financiada por el Congreso.
Según la Fiscalía, la campaña reiteró ante los donantes que la totalidad de los fondos se destinaría a ese fin, pero en realidad cientos de miles de dólares se desviaron para uso personal de sus promotores.
Como ejemplo, la acusación señalaba que Kolfage tomó más de 350.000 dólares y que junto al resto de responsables se aseguró de tapar esos pagos canalizándolos a través de entidades y cuentas que ellos controlaban.