Acabo de leer esta noticia: en una reciente feria de libros los textos más buscados fueron horóscopos y novelas de ficción científica. La gente, que pisa la tierra y compra en los supermercados, tiene la cabeza puesta en las nubes;  aspira a conocer el porvenir a través de las estrellas y quiere que la ciencia se aproxime a la magia.  Mediante un acto imaginativo fundimos la adivinación, la astrología, las ciencias y las técnicas.  Las mismas personas prácticas, que se precian de “no caer en ganchos”, que no creen en las promesas de los políticos, ni en “el más allá”, son quienes buscan  horóscopos y sueñan con “viajes interplanetarios”.

 Para hacer predicciones en el campo económico y en el político es necesario contar con esa “condición doble” de todo ser humano.  Es posible que la economía dominicana crezca y la política se mantenga estancada o sufra “un vuelco eruptivo”.  La isla de Santo Domingo tiene una posición central en el archipiélago antillano; posee una extensa red de carreteras, puentes, elevados; también una envidiable infraestructura de presas, canales, puertos marítimos bien equipados, aeropuertos.  En nuestro país todo el mundo usa teléfonos móviles, algo que facilita el mercadeo, por vías digitales, de cualquier cosa que usted quiera promover o vender.

Jamaica  ni Puerto Rico están en mejores posiciones que la República Dominicana  como destinos para inversiones, extranjeras o locales.  Jamaica permanece ligada comercialmente al Reino Unido de la Gran Bretaña; Puerto Rico es, para muchos fines, parte de los EUA.  Ni siquiera Cuba, la isla más grande de la región, podrá competir con nosotros en el futuro cercano.  Cuando termine el régimen de Fidel Castro quedarán “mataduras sociales” parecidas a las que sufrimos en la RD al caer la dictadura de Trujillo.  Todavía estamos “afectados” por los treinta años del trujillato.  Fidel Castro gobierna desde hace medio siglo.

Rafael Rojas, historiador y ensayista cubano, escribió un libro titulado “Tumbas sin sosiego. Revolución, disidencia y exilio del intelectual cubano” (2006). Premio Anagrama (2006),    texto donde Rojas propone la integración armoniosa de “las dos cubas”: la cubanía de La Florida y la que nació y creció en la isla.  Dicha tarea no parece fácil.  Realmente, nuestros mayores problemas inmediatos podrían no ser económicos sino políticos.