A PLENO PULMÓN
Historia como problema

<STRONG>A PLENO PULMÓN<BR></STRONG>Historia como problema

Escribir la historia de una sociedad casi nunca es un trabajo inocente.  Las historias, generalmente, se “construyen” para olvidar unos hechos y recordar otros, mas convenientes o útiles en el momento de la compilación.  Por eso se dice que una “historia oficial” se acomoda siempre a los intereses del gobierno.  Con frecuencia estas historias “autorizadas” por el poder son instrumentos de coerción ideológica.  Los métodos de investigación histórica se han refinado mucho en los últimos dos siglos.  No así los trucos de manipulación social de la historia.

 Las llamadas “historias sociales y económicas” privilegian la observación del reparto de la renta nacional.  ¿Cuánto ganan terratenientes y capitalistas? ¿Qué porcentaje de la renta va a parar a manos de los trabajadores?  Cada grupo social tiene acceso a un trozo diferente del pastel de la riqueza.  Al conocer el proyecto gubernamental de publicar “Historia general del pueblo dominicano” me pregunté: ¿Cuáles son las ideas motoras que animan este programa monumental, valorado en quince millones de pesos?

¿Cómo entienden sus autores la noción histórica de periodo? ¿La idea de nación? ¿El concepto de identidad en sentido sociológico? Setenta y dos intelectuales  trabajarán en la confección de esta obra, según declaró Roberto Cassá a la periodista Ángela Peña.  En la pagina “Web” del Archivo General de la Nación aparecen los nombres de redactores responsables de “la empresa”.  ¿Habrá un “criterio unificador”, un plan rector? ¿Será una colección de opiniones? ¿Una doxografía polivalente? ¿O una simple colcha de retazos?

 La historia dominicana atañe a todos los dominicanos.  No ha empezado a escribirse este año.  Los actores principales de nuestra historia han dejado miles de documentos con las huellas de su actividad.  Franceses, ingleses, españoles, norteamericanos, haitianos, han expresado sus pareceres a lo largo del tiempo.  Dominicanos pobres y ricos, blancos y negros, también lo han hecho.  La historia  “tiene lugar” entre varias clases sociales, diferentes ideas y múltiples intereses.  ¿Por cual razón el estudio debe concluir en el año 2000? ¿Por ser el inicio de un nuevo siglo? ¿Por ser un número redondo? Me gustaría saber cuáles son las ideas centrales que definen este programa editorial del AGN.  Según Ortega, historia es sistema; es obvio que también podría ser problema.

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