A Rafael

A Rafael

MANUEL RDO. CONTÍN CUESTA
Lo conocí en década del cuarenta, específicamente el año 1947. Llegaba a esta ciudad, procedente de mi pueblo natal, Yaguate. Traía en el bulto de las esperanzas, inscribirme en la Facultad de Odontología. A esa hora ya había aprobado el último curso de bachillerato.

No es común el conocer una persona, y de inmediato sin transcurrir un tiempo; solictarle un favor. Con el Profesor Kasse Acta no había ninguna duda, era de fácil acceso, tratable, sencillo, sin la arrogancia que otros ejercían. No fue indiferente a nada de su entorno.

Un profesor culto, que traspasaba las fronteras de su profesión; para transitar en otras disciplinas del saber humano. Eso lo veíamos en las páginas del matutino Hoy, con sus artículos de variados temas, abarcando materias del extenso ámbito de una cultura universal.

La persona que no se le fueron los humos a la cabeza. Luchó con su enfermedad, como ya lo había hecho en el curso de su vida. Sin gestos, ni petulancias. Sus actividades siguieron igualitas, a las que exhibió a lo largo del ejercicio profesional. El sillón de la Rectoría no lo modeló como pasa con algunas personas en esas circunstancias. Era una persona ejemplar para estos tiempos que estamos viviendo. La profesión perdió un gran dominicano. Su partido el PLD, también notará el vacío de su ausencia, pero dejó grandes escritos, que en su organización, sabrán estudiarlos.

 

Publicaciones Relacionadas

Más leídas