Con una fiesta amenizada por los Hermanos Rosario, Sandra y Filipo Ciccone,  celebraron el octavo aniversario de Montecristo Café    

POR INGRIS LEYBA
Los contagiosos merengues de los Hermanos Rosario, la alegría de los invitados, en su mayoría jóvenes y la efervescencia que de por sí caracteriza a este tipo de negocios, fueron parte de las emociones a flor de piel en la celebración que por su octavo aniversario organizaron los propietarios de Montecristo Café. 

El ameno encuentro, que inició ya bien entrada la noche se realizó con el objetivo, según sus propietarios Sandra y Filipo Ciccone de agradecer a sus clientes asiduos, relacionados y amigos el apoyo brindado durante estos ocho años.

El centro de diversión que en la actualidad luce un interior renovado, inspirado en elementos más contemporáneos, con modernos equipos de luces, ofrece ahora un ambiente más acogedor a sus asistentes, y una temperatura más cálida. 

Sandra de Ciccone, quien exhibió un hermoso vestido azul, holgado y su esposo Filipo Ciccone, con traje formal, como de costumbre compartieron amistosamente con sus invitados por unas horas, hasta que la música de los afamados merengueros empezó, impregnando de alegría y festividad el entorno.    

Durante el encuentro, los anfitriones utilizaron la ocasión para presentar el  programa de actividades del negocio, compuesto por los denominados “Martes Di vinos”, en los que cada martes de 6:00 a 8:00 de la noche se degustan una amplia variedad de vinos y champagne; “La destilería”, en el que ofrecen destilados de whiskys y vodka con atractivos descuentos en litros.

De igual forma, los domingos tienen la actividad “Ladies Night”, donde las damas disfrutarán de un open bar todas las noches.