Por REYES GUZMÁN
No sólo República Dominicana está en expectativa por la presentación el miércoles de Sting en Altos de Chavón, sino muchos países siguen los pasos de “Broken Music Tour”, una gira que le permite al público presenciar al más grande de los artistas y disfrutar sus éxitos. A sólo dos días de la presentación, la gente sigue expresando su interés por ver de cerca al cantante británico, por ser testigo de su primera visita y brindarle el mayor aplauso.

La emoción se mezcla con la necesidad de verle, lo que hace más importante su actuación. Y es que su carrera artística, desde The Police hasta hoy en solitario, recrea una cadena de grandes éxitos que le ha servido para tener los pies en la tierra y siempre ser el hombre sencillo y respetuoso del público. El 1 de abril  estuvo en la Universidad Estatal de San José, California, como parte de lo que es “Broken Music Tour”, inspirado en  sus memorias publicadas en 2003.

Quien logró fama y fortuna en las décadas de 1970 y 1980, tiene como compañero inseparable el instrumento de bajo y para sus conciertos cuenta con dos guitarristas y un percusionista. Quizás sin proponérselo nos hace recordar al grupo The Police, trío de rock con el que abrió las puertas de los gustos más exigentes.

Con “Broken Music Tour” pone puntos muy diferentes a lo que  fue la  gira “ Sacred Love”, el año pasado y que incluyó a Annie Lennox, muchos músicos, pantallas gigantes, iluminación interactiva y mil efectos más.

Con 53 años de edad, fama, dinero y el privilegio de tener millones de admiradores, no es motivo para que Sting cambie, para que aparte la forma de ser que le ha dado resultados positivos. Querido y respetado, es el artista que con orgullo los dominicanos y visitantes tendrán el miércoles de frente. El intercambio consiste en canciones por aplausos, admiración por respeto y música por reacciones, además de una carga de efectos visuales y de sonido.

Con 95 millones de discos vendidos durante su carrera no le fue fácil seleccionar los temas de la gira. Trae canciones con acompañamiento de guitarra y afirma que el concierto es muy crudo y descarnado, diferente a todo lo que ha hecho en mucho tiempo.

Sting no se queda en el rock, va al pop y el jazz, como expresión de que al público hay que darle cada día más.

MÚSICOS

Josh Freese (percusión), Dominic Millar y Lily Workman (guitarras), acompañan a Sting. De Josh hay que recordar que es un músico de sesiones, sobresaliendo por su trabajo con A Perfect Circle y The Vandals. Gusta del rock y el jazz. En “Broken Music Tour” no toca con excesos, baja el tono.

Millar cuenta con una lista de triunfos por su forma de tocar la guitarra. Igual Lily.