Cuando se piensa en hacer algunos que otros cambios en la decoración, por lo general se suele tomar en cuenta la temporada: si es fresca, caliente o fría y, a partir de ahí, elegir texturas adecuadas, ya sea para la primavera, en que por lo regular se imponen los colores de la flora; el verano, colores que tengan efectos refrescantes, y en el otoño o invierto, tonos más cálidos en el sentido de la temperatura, ya que es en esta cuando suelen bajar a su menor expresión.

Sin embargo, esas texturas que tradicionalmente se han visto como propias de las temporadas frías, como son los estampados de “animal prints”, teciopelo, los clásicos cuadros, haciendo contraste igualmente con los denominados botánicos o lo que es lo mismo, los florales, este verano son la tendencia en la decoración de interiores.

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De acuerdo con datos de expertos en interiorismo colgados en diferentes plataformas, como pinterest, lavanguardia.com… el terciopelo azul, el estampado de cuero de vaca, zebra, leopardo…, así como los que reflejan la belleza de la flora, son los que protagonizan los tapizados.

Con ellos pueden hacerse contrastes en la decoración, agregando un par de cojines, una butaca, unos taburetes, una colcha para la cama, un sofá…, pero también se pueden usar en un empapelado para una pared en un pasillo, en la sala, el baño, balcón, un salón de entretenimiento… Una silla tapizada en cuero de vaca es una de las opciones para contrastar en su sala.