Hoy 
POR CARMEN CARVAJAL
El doctor Leonel Fernández Reyna cumple el martes su primer año de gobierno con éxitos considerables en la gestión de la crisis económica en que encontró sumido el país, pero con críticas en aspecto institucionales y del manejo de los casos de corrupción pasados y presentes, y sobre los graves problemas de seguridad ciudadana.
Cuando el 16 de agosto del pasado año Fernández Reyna asumió la Presidencia de la República, la esperanza de la mayoría de los dominicanos era de que el nuevo gobierno lograra detener la caída libre en la calidad de vida de los dominicanos, estabilizar la tasa de cambio y reducir los niveles de inflación.
El panorama se caracterizaba por una tasa negativa de crecimiento del PIB, un incremento acelerado de la tasa de desempleo, una tasa de cambio de 42 pesos por dólar, una inflación superior al 50%, elevadas tasas de interés, un déficit cuasi fiscal de más de 87 mil millones de pesos, y una generalizada falta de confianza.
Un año después, con esas metas iniciales más que superadas, el gobierno de Fernández y el Partido de la Liberación Dominicana, enfrenta otros retos y aspiraciones en los que todavía no ha podido exhibir los logros mostrados en el aspecto económico
Es bien sabido que cuanto más se tiene, más se quiere, y hoy, esos objetivos ya no bastan para los sectores de clase media hacia abajo que sufrieron en carne propia la grave crisis económica, y que aún no recuperan su nivel de vida muchos, y otros, ni siquiera su empleo.
Muchos, la mayoría, reclaman avances en el combate a la delincuencia y a la violencia, a la corrupción, mejoría en el aspecto institucional. En cuanto a las políticas sociales, analistas de la sociedad civil y algunos economistas reconocen buenos objetivos y planes, pero no ven claro la forma en que se ejecutarán los mismos.
Artículos de opinión, paneles y seminarios, así como intervenciones en los medios de diferentes personajes y grupos han analizan en estos días este primer año del segundo mandato de Fernández, y su Partido de la Liberación Dominicana, en la jefatura del Poder Ejecutivo.
«Nadie pensaba hace un año que a estas alturas se pudiera haber logrado la estabilidad económica, y recuperado el crecimiento, reducir y estabilizar la prima del dólar y bajar la inflación a apenas un uno por ciento. Son logros extraordinarios», planteó el economista Miguel Ceara Hatton, al evaluar estos primeros doce meses del año.
Reconoce en el gobierno una vocación para ejecutar una buena política social, pero hasta ahora no ha tenido tiempo de desarrollar más que las que van dirigidas a los más pobres, como es el caso de «Solidaridad» y «Comer es primero».
LOS LOGROS
La pasada semana el gobernador del Banco Central dio a conocer el informe del desenvolvimiento de la economía dominicana durante el primer semestre del presente año. Los datos preliminares reportan un crecimiento del producto interno bruto de 5.8%.
Es decir, a menos de once meses del cambio de gobierno, la economía pasaba de un decrecimiento, a una tasa positiva de casi 6%. Resaltaba el gobernador Héctor Valdez Albizu que este crecimiento se logró manteniendo la estabilidad cambiaria, con bajísimas tasas de inflación, y con reducciones en las tasas de interés.
La tasa de inflación para el semestre fue de 0.82%, y anualizada, de -0.98. La tasa de cambio bajó y se mantiene estable a 29 pesos, lo que, junto con un aumento de 30% en el salario de los servidores públicos y privados, provocó significativa mejoría en el poder adquisitivo. También se registraron reducciones significativas en las tasas de interés, y un superávit fiscal de más de 10 mil millones de dólares.
El gobierno logró, tras establecer un estricto acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, renegociar todas sus deudas externas, públicas y privadas, incluyendo la que asumió el Estado con Unión Fenosa, a raíz de la recompra de Edesur y Edenorte. En este caso, los informes oficiales afirman que el caso de esta deuda con la eléctrica española se logró una reducción de 50%.
Sin embargo, en una reciente encuesta del periódico HOY, la mayoría de los consultados entendía que la economía está mal y consideran que los precios están muy elevados. Esta percepción puede tener su origen en el hecho de que el gobierno no ha podido reducir los elevados niveles de desempleo.
La reactivación de la economía descansó en sectores que, como la comunicación, no son intensivos en el uso de mano de obra. Los grandes empleadores, construcción y zonas francas, decrecieron.
LO ECONOMICO
Encontramos una estabilidad de la taza del dólar, la renegociación de la deuda externa, el reestablecimiento del acuerdo con el FMI, el control de la inflación que se proyecta que sea menos de un 1% para este año, mejorías en la recaudación y se dan pasos para reducir la evasión fiscal. Así también, se incrementó el salario mínimo en un 15% y se espera que se aplique otro 15% en el 2005.
BIEN, PERO
En el aspecto de las políticas sociales el gobierno ha anunciado una serie de planes encaminados a aliviar la carga a los más pobres de la sociedad. Es el caso de los proyectos denominados «Solidaridad» y «Comer es primero».
Aunque algunos, como Ceara Hatton, entienden que el gobierno da muestras de interés en ejecutar planes sociales serios, aún no ha tenido tiempo para desarrollar más que los dos citados.
En otros aspectos, las políticas sociales no están muy claras, y se cita entre los críticos, el hecho de que a un año de la toma de posesión, la situación de los hospitales sigue siendo crítica, y no se vislumbran mejoría en el corto plazo.
Tampoco se ha logrado mucho en materia de transporte de pasajero, que es componente importante en el gasto de las familias de menores ingresos. El deterioro en el parque de la OMSA, tal vez debido a la propia crisis económica del país, no ha podido ser conjurado. Al principio de la gestión se anunció la posibilidad de la construcción de un metro, que sería el inicio de la solución definitiva al problema, sin embargo, tras una lluvia de críticas por algunos sectores, y el surgimiento de numerosas ideas para soluciones supuestamente más baratas, los planes se congelaron.
Mientras, los usuarios del transporte público esperan, mientras sufren las «atenciones», de los transportistas dueños de rutas y calles de la ciudad.
LAS SOMBRAS
Los elevados niveles de delincuencia y la violencia que diariamente acaba con la vida de dominicanos de todas las edades y lugares, es uno de los mayores reclamos de la ciudadanía al gobierno.
Esta es una meta sobre la que el gobierno ha trazado planes, al igual que sobre el saneamiento y modernización de la Policía Nacional, cuyo grado de ineficiencia, falta de equipamiento, y corrupción, está en cierta medida ligado al problema de la seguridad ciudadana.
Los críticos del gobierno en tienden que tampoco en materia de combate a la corrupción el gobierno ha pasado la prueba, y algunos, como el caso de participantes en un reciente encuentro celebrado en el Centro Juan Montalvo, cuestionan el nombramiento en el gabinete de algunos de los acusados en el caso PEME.
El gobierno ha anunciado importantes iniciativa, como una ley para regular las compras públicas, cuyo contenido se adelantaría mediante un decreto, que aún no llega.
También están pendientes las reformas estructurales acordadas con el FMI, como la reforma fiscal que está en avanzado proceso.
