La Asociación de Bancos Múltiples de República Dominicana (ABA) anunció que creará un fondo para donar a la comunidad afectada y a las entidades que realizan labores humanitarias y de resiliencia social en la zona impactada por la catástrofe que desde el lunes afecta a San Cristóbal y ha provocado estragos.
Un documento explica que la decisión es parte de medidas que desde el sector bancario buscan apoyar a las personas y empresas afectadas por la explosión y que ha dejado 27 fallecidos, 59 heridos y una profunda conmoción en todo el país.
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En su comunicado la ABA dijo que “en estos momentos las entidades de intermediación financiera evalúan algunas medidas que buscan aliviar la carga de los clientes bancarios afectados por esta tragedia, para que puedan renegociar, reestructurar o solicitar prórrogas para el pago de sus compromisos bancarios, incluyendo tasas preferenciales”.
Con ese objetivo llamó a que los usuarios se mantengan atentos a las precisiones que ofrecerán sus instituciones bancarias.
“Como sector nos unimos al dolor que les embarga en estos momentos y expresamos nuestra mayor disposición de acompañarles en este proceso”, sostuvo la ABA.
Reiteró su solidaridad con las familias de las personas fallecidas y desaparecidas y con aquellos afectados que son atendidos en centros de salud.
La organización que agrupa a las instituciones bancarias y financieras de República Dominicana reaccionó de esa forma ante el dolor que ha generado a nivel nacional la explosión en una empresa procesadora de plásticos el pasado lunes que afectó a decenas de establecimientos comerciales en un área de más de 400 metros incluidas sucursales de bancos, entre estas las del Banco de Reservas, donde murió una empleada y dejó a dos colaboradores heridos.
En tanto, el Banco Popular anunció un aporte de RD$30 millones para la asistencia. Dijo que una partida de RD$20 millones será gestionada por la Diócesis de la Iglesia católica de Baní, que comprende a San Cristóbal, con monseñor Víctor Masalles a la cabeza, y la otra entregada a los directivos del Plan Estratégico de Desarrollo Provincial, presidido por José Francisco Martich, para ser invertidos en iniciativas de recuperación y resiliencia de la comunidad.