SANTIAGO. El constante abandono y  destrucción  de casas antiguas amenaza con afectar de manera sensible el turismo cultural que por años  ha caracterizado el Centro Histórico de la ciudad.

Los residentes en esta ciudad han contemplado con impotencia cómo gran parte de estas construcciones, golpeadas por los años, han ido desapareciendo al ser abandonadas por sus propietarios y por el otorgamiento de los permisos  para su destrucción por la Dirección de Patrimonio Cultural.

Los  hoteles Mercedes y  Matum, las casas victorianas y el Monumento a los Héroes de la Restauración, son  emblemas patrimoniales de la ciudad corazón. Solo el Monumento y el hotel Matum mantienen su esencia.

“Últimamente se han otorgados permisos para derrumbar casas donde muchos han crecido admirando sus hermosas   arquitecturas con tendencias y estilos victorianos y otros estilos propios de esta ciudad”, expresó  el doctor José Rafael Domínguez, investigador e historiador sobre patrimonio cultural.

“Pero lo más vergonzoso es que tienen el consentimiento de la oficina de Patrimonio Cultural de Santiago, que ha autorizado remodelaciones ajenas a su arquitectura original, eliminado  los hermosos y elaborados trazos y grandes puertas, por elementos de cristales que distan de la verdadera esencia del estilo”, explicó.

Señaló que no se sabe hasta cuándo sucederán y cuál es la política de los funcionarios de las instituciones que deben velar por su protección, ya  que restaurar una casa patrimonial no es simplemente una fachada, sino que es en conjunto lo que la hace ser interesante y que no pierda su esencia.

“Y es de vital importancia y urgencia que nuestros gobiernos  tomen cartas en el asunto e investiguen qué está pasando   con la destrucción de tantas casas coloniales y detengan las destrucciones masivas, para luego construir parqueos u otros inmuebles  que rompen con los estilos ya existentes en esta área, considerada en teoría como zona de protección absoluta”, explicó Domínguez.

Indicó que la ciudad está perdiendo su orgullo que  por tanto tiempo la han caracterizado,  por mantener un departamento cultural,  “que al parecer solo le interesa borrar de nuestra historia un aspecto tan importante para la población, como  su belleza arquitectónica de siglos pasados”.    

Domínguez dijo que es importante que exista  un patronato organizado, que funcione con personas decididas a trabajar, no solo denunciando en los medios, sino trabajando, y haciendo que tanto Patrimonio Cultural como el ayuntamiento tomen medidas de conservación.

Consideró que esas instituciones deben hacer un análisis de cuántas casas hay abandonadas por sus dueños y convertirlas en museos  y centros culturales, que sirvan para engrandecer el turismo de la ciudad.

En su opinión, esto obligaría a sus  propietarios a darles mantenimiento o rentarlas,  “pues esa costumbre de abandonarlas es con el propósito  que colapsen y luego construir  inmuebles modernos”.

Robert Espinal.  El historiador Robert Espinal se preguntó, al  igual que cientos de ciudadanos que aman el avance cultural, histórico y turístico de la ciudad,   ¿quiénes se decidirán a devolverle el esplendor perdido  al hotel Mercedes, una joya arquitectónica del siglo pasado?

Al ser entrevistado al respecto, señaló que este hotel, con un notorio deterioro en sus instalaciones, abandonado al paso del tiempo, lleno de escombros y su “roof garden” y su llamativo linternón, que había sido convertido en palomar por las aves,  está hecho una completa ruina.

“Si algún empresario o los propietarios decidieran  reestructurar el hotel Mercedes, dejando su esencia colonial, sus balcones, Santiago podría convertirse en un destino turístico de primera línea. La calle 30 de Marzo volvería a tener el esplendor de antes y el flujo de visitantes sería para la zona grandioso. Un hotel con esa historia atraería muchos turistas”, manifestó Espinal.

El Mercedes.  El  hotel Mercedes se ha convertido en  una completa ruina, sin que los munícipes  puedan soñar con que esa obra  sea  rescatada por sus propietarios, que se mantienen   indiferentes como si no les importara,  luego de un largo proceso judicial 

El hotel fue  inaugurado el 9 de abril de 1929 y declarado patrimonio nacional por el Poder Ejecutivo el 29 de abril de 1991. 

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La construcción

El hotel Mercedes fue construido por  el ingeniero español Romualdo García Veras en 1928 para los hermanos españoles  Gabriel y Francisco Robledo García, para servir como hotel. En la  obra de los inicios del hormigón armado en esta ciudad  se destacan los  diseños ornamentales y las aplicaciones de pisos y cerámicas, así como su terraza cubierta, en la que  un hueco central circular  permite ver sus cinco pisos.